La estrella pop fue una de las protagonistas del show de medio tiempo del Super Bowl, espectáculo que se vio ensombrecido por un aparatoso incidente.
Una de las máximas estrellas de Estados Unidos, la morena Beyoncé se lució en un show digno de repetirse durante el medio tiempo del Super Bowl, espectáculo que estuvo acompañado del buen rock de Coldplay y de la melodiosa voz de Bruno Mars.
El show que rápidamente se convirtió en tendencia en las redes sociales, tuvomomentos memorables pero sin duda el más comentado fue el aparatoso traspiés de la estrella pop que estuvo a punto de caer del escenario durante uno de sus bailes.
Enfundada en un ceñido traje de cuero negro, Beyoncé se salvó de caer saltando atrás durante parte de su coreografía.
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