Se trata de crías de entre quince días y un mes de nacidas, que, ante la falta de pelaje suficiente para protegerse del frío, no lograron resistir las bajas temperaturas.
Al menos 20.000 crías de camélidos han muerto por las bajas temperaturas y las intensas lluvias caídas desde enero en el sur de Perú, en la provincia Caylloma, más de la mitad de los 37.000 registrados en esa zona, confirmaron hoy a Efe fuentes de esa municipalidad.
Caylloma, en el departamento de Arequipa, soporta desde finales de febrero temperaturas de menos tres y cuatro grados, lo que, sumado a las fuertes lluvias de enero y a la presencia de nieve, causó la muerte de crías de camélidos recién nacidos, explicó a Efe el secretario técnico de esa municipalidad, Juan Mamani Quispe.
Se trata de crías de entre quince días y un mes de nacidas, que, ante la falta de pelaje suficiente para protegerse del frío, no lograron resistir las bajas temperaturas, precisó.
Según el recuento provisional, más de 7.000 camélidos, mayoritariamente alpacas, murieron en el distrito de Caylloma, mientras que en otros tres distritos las autoridades barajan cifras que superan las 4.000 y 5.000 muertes en cada lugar.
Fuentes del Ministerio de Agricultura indicaron a Efe que no podían confirmar estas cifras, porque aún no han recibido el reporte oficial de las autoridades locales.
Según Mamani, el elevado número de animales muertos es una "situación excepcional" que ha obligado a decretar el estado de emergencia en la provincia, así como a solicitar ayuda al gobierno regional.
"Los daños sufridos son bastante fuertes. No solamente en la parte ganadera, sino también en agraria: los cultivos de papas, maíz y arveja se han visto también afectados", señaló, para agregar que el mal tiempo en los últimos tres meses también ha dañado las carreteras.
Las autoridades locales están pendientes de cuantificar los daños económicos derivados de la muerte de los camélidos, aunque sí estimaron en más de dos millones de dólares los daños producidos en las carreteras.
Perú tiene unos seis millones de camélidos y se calcula que el frío invernal mata cada año a una quinta parte, si bien la mortandad, según cifras oficiales, se redujo un 15% entre 2005 y 2008 con la aplicación de programas estatales de estabulación y protección de los rebaños.
Una libra de lana de camélidos como la vicuña alcanza un valor en el mercado local de 400 dólares y llega a los 2.000 dólares en el internacional. EFE
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