Arzobispo de Trujillo condena el grado de violencia en la sociedad

El arzobispo de Trujillo, Miguel Cabrejos Vidarte, condenó el alto grado de violencia que azota a la ciudad tras el reciente asesinato de un niño de 12 años a cargo de sicarios adolescentes en el distrito de Víctor Larco.

El prelado acudió al velorio de los restos de Alejandro Arriaga para ofrecer sus condolencias a los padres del pequeño, Rosa Huaccha y Wilder Arriaga.

A su salida, invocó al Supremo Hacedor iluminar a todas las personas para defender y valorar nuestra vida y la de los demás.

“El día que valoremos la vida de los demás, creo que Trujillo recién va a cambiar”, expresó, en medio del dolor de los familiares y amigos de la inocente víctima quien murió al intentar proteger a su hermano menor.

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