Joven cadete presenta problemas psicológicos tras violación, motivo por el cual sería retirada de institución, sin recibir el apoyo para enfrentar la situación.
Diana Bazán Hidalgo, cadete de la Fuerza Aérea del Perú (FAP) que denunció ser víctima de una violación el año pasado, será dada de baja por la institución militar, informaron sus padres en RPP.
Marlene Hidalgo, madre de la cadete, señaló que su hija culminó primer año en la FAP con buenas notas, sin embargo tras la recaída en septiembre no volvió a ser integrada a la institución, y será dada de baja por una secuela de la agresión sexual que padeció, y por la cual no recibió el debido tratamiento.
Según la madre de la joven, la FAP argumenta inaptitud física para pasar a su hija al retiro debido a que en el mes de septiembre, tuvo una recaída en su salud mental.
"Tengo conocimiento que le va a dar de baja a mi hija por inaptitud física, que significa algo mental por lo que tuvo en septiembre del año pasado una recaída, porque de tantos problemas ella no quiso seguir más, tantos problemas, cansada, aburrida de esta situación. Ella tomó unas pastillas. No quería pensar", indicó.
"Parece que mi hija fuera el monstruo"
"A raíz de esa situación, ahora no se acuerdan de lo que pasó. Hay que hacerle recordar al comandante general de la FAP que mi hija fue violada en su institución donde yo dejé a mi hija a cargo de ellos y me la entregaron, aún siendo ahora cadete, no le dan apoyo. Parece que mi hija fuera el monstruo allí", expresó.
Según explicó en RPP, Diana es víctima de castigos y sanciones desde que regresó a la institución tras la denuncia de violación y no ha recibido ningún tipo de apoyo por parte de la FAP ni el hospital.
La madre aclaró que no desea que su hija retorne a la institución castrense pero sí luchará hasta las últimas consecuencias por el bienestar de Diana, así como una indemnización por el daño sufrido. Por ello, solicitó a Pilar Nores, esposa del presidente Alan García, apoyo para resolver el caso.
Denuncian falta de apoyo en la FAP
El padre de la joven, Javier Bazán, reconoció que su hija tuvo una sobredosis de pastillas para dormir, que son consignadas como un intento de suicidio por la FAP. Al respecto, indicó que su hija tomó las pastillas que le fueron recetadas.
Además, refirió que durante la etapa de estudios incluso no consumía las pastillas porque debía elegir entre el tratamiento y estudiar para mantener sus calificaciones en la FAP.
"Ella dejó de tomar inclusive porque tenía la presión de la Escuela por estudiar, o estudiaba o estaba en un tratamiento médico. El tratamiento médico le decía toma las pastillas para que duermas, pero a la vez en la Escuela le decían tienes que rendir y actualizarte en 369 horas de clases académicas para que te pongas al día", manifestó.
El padre también aclaró que no se dejó que su hija fuera hospitalizada porque cuando ya ella estaba en proceso de recuperación, tras la difusión de la denuncia, Diana se encontraba drogada. "La estaban tratando de transformar en esa área de ese hospital", declaró, al referir que los propios médicos reconocían que no era el lugar apropiado para ella.
Marlene Hidalgo, madre de la cadete, señaló que su hija culminó primer año en la FAP con buenas notas, sin embargo tras la recaída en septiembre no volvió a ser integrada a la institución, y será dada de baja por una secuela de la agresión sexual que padeció, y por la cual no recibió el debido tratamiento.
Según la madre de la joven, la FAP argumenta inaptitud física para pasar a su hija al retiro debido a que en el mes de septiembre, tuvo una recaída en su salud mental.
"Tengo conocimiento que le va a dar de baja a mi hija por inaptitud física, que significa algo mental por lo que tuvo en septiembre del año pasado una recaída, porque de tantos problemas ella no quiso seguir más, tantos problemas, cansada, aburrida de esta situación. Ella tomó unas pastillas. No quería pensar", indicó.
"Parece que mi hija fuera el monstruo"
"A raíz de esa situación, ahora no se acuerdan de lo que pasó. Hay que hacerle recordar al comandante general de la FAP que mi hija fue violada en su institución donde yo dejé a mi hija a cargo de ellos y me la entregaron, aún siendo ahora cadete, no le dan apoyo. Parece que mi hija fuera el monstruo allí", expresó.
Según explicó en RPP, Diana es víctima de castigos y sanciones desde que regresó a la institución tras la denuncia de violación y no ha recibido ningún tipo de apoyo por parte de la FAP ni el hospital.
La madre aclaró que no desea que su hija retorne a la institución castrense pero sí luchará hasta las últimas consecuencias por el bienestar de Diana, así como una indemnización por el daño sufrido. Por ello, solicitó a Pilar Nores, esposa del presidente Alan García, apoyo para resolver el caso.
Denuncian falta de apoyo en la FAP
El padre de la joven, Javier Bazán, reconoció que su hija tuvo una sobredosis de pastillas para dormir, que son consignadas como un intento de suicidio por la FAP. Al respecto, indicó que su hija tomó las pastillas que le fueron recetadas.
Además, refirió que durante la etapa de estudios incluso no consumía las pastillas porque debía elegir entre el tratamiento y estudiar para mantener sus calificaciones en la FAP.
"Ella dejó de tomar inclusive porque tenía la presión de la Escuela por estudiar, o estudiaba o estaba en un tratamiento médico. El tratamiento médico le decía toma las pastillas para que duermas, pero a la vez en la Escuela le decían tienes que rendir y actualizarte en 369 horas de clases académicas para que te pongas al día", manifestó.
El padre también aclaró que no se dejó que su hija fuera hospitalizada porque cuando ya ella estaba en proceso de recuperación, tras la difusión de la denuncia, Diana se encontraba drogada. "La estaban tratando de transformar en esa área de ese hospital", declaró, al referir que los propios médicos reconocían que no era el lugar apropiado para ella.
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