La Iglesia católica celebra mañana el Día de los Difuntos, en el que es tradicional visitar los cementerios.
En muchos países hoy se conmemora el Día de todos los Santos, víspera del día de los Difuntos, una tradición cristiana instituida en honor de Todos los Santos, conocidos y desconocidos.
En el Perú muchas personas acuden a los cementerios para recordar a sus seres queridos llevándoles flores o globos y otros acuden con comidas y bebidas para compartir.
Según informó RPP, comerciantes del mercado "El Bosque" en el distrito limeño de San Juan de Lurigancho incrementaron la venta de frutas en este día, sobre todo en mangos, manzanas, naranjas y plátanos; variedades que tienen precios que oscilan entre 1.50 y dos nuevos soles el kilogramo; y en el caso de los plátanos se venden a 0.10 céntimos de sol la unidad.
"Bastante público está llevando cantidad de fruta reunirse con toda la familia, llevar la fruta que más le gustaba a los difuntos y comparten con ellos", dijo Fermín, un comerciante de este centro de abastos.
Como es costumbre, en diferentes ciudades del interior del país las personas acostumbran ofrecer cosas a sus seres queridos difuntos; tradición que se da desde tiempos prehispánicos, en que las diferentes civilizaciones enterraban a sus muertos con ofrendas de bebida o comidas, joyas y atuendos más preciados; pues se tiene la creencia de que estos bienes se disfrutarán en la otra vida.
Cabe destacar que en los países de tradición católica, se celebra el 1 de noviembre; mientras que en la Iglesia Ortodoxa se celebra el primer domingo después de Pentecostés; aunque también la celebran las Iglesias Anglicana y Luterana. En ella se venera a todos los santos que no tienen una fiesta propia en el calendario litúrgico y por tradición es un día feriado no laborable.
En el Perú muchas personas acuden a los cementerios para recordar a sus seres queridos llevándoles flores o globos y otros acuden con comidas y bebidas para compartir.
Según informó RPP, comerciantes del mercado "El Bosque" en el distrito limeño de San Juan de Lurigancho incrementaron la venta de frutas en este día, sobre todo en mangos, manzanas, naranjas y plátanos; variedades que tienen precios que oscilan entre 1.50 y dos nuevos soles el kilogramo; y en el caso de los plátanos se venden a 0.10 céntimos de sol la unidad.
"Bastante público está llevando cantidad de fruta reunirse con toda la familia, llevar la fruta que más le gustaba a los difuntos y comparten con ellos", dijo Fermín, un comerciante de este centro de abastos.
Como es costumbre, en diferentes ciudades del interior del país las personas acostumbran ofrecer cosas a sus seres queridos difuntos; tradición que se da desde tiempos prehispánicos, en que las diferentes civilizaciones enterraban a sus muertos con ofrendas de bebida o comidas, joyas y atuendos más preciados; pues se tiene la creencia de que estos bienes se disfrutarán en la otra vida.
Cabe destacar que en los países de tradición católica, se celebra el 1 de noviembre; mientras que en la Iglesia Ortodoxa se celebra el primer domingo después de Pentecostés; aunque también la celebran las Iglesias Anglicana y Luterana. En ella se venera a todos los santos que no tienen una fiesta propia en el calendario litúrgico y por tradición es un día feriado no laborable.
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