Una inesperada requisa realizada esta mañana en dicho penal permitió incautar 11 celulares, 9 cargadores, 9 chips y más de un centenar de armas punzo cortantes.
Una inesperada requisa realizada esta mañana en el penal de Picsi (Chiclayo) permitió incautar 11 celulares, 9 cargadores, 9 chips y más de un centenar de armas punzo cortantes, que eran escondidas por los internos en los inodoros de los baños y las paredes de las celdas.
La intervención empezó desde las 7 de la mañana y se desarrolló en el pabellón C de reos comunes, con la participación de dos fiscales de la Tercera Fiscalía Provincial Penal Corporativa de Chiclayo y 60 agentes del Instituto Nacional Penitenciario (INPE).
Todos estos equipos que servían para extorsionar a empresarios y transportistas de la región habían sido cuidadosamente camuflados en los servicios higiénicos de los pabellones.
Sergio Haro Huapaya, jefe regional de la zona Norte del INPE, expresó que el nivel de hacinamiento en el penal está a punto llegar a su límite máximo, por lo que es muy difícil requisar todos estos equipos de telefonía.
“Esto se está volviendo insoportable, pero vamos a restringir paulatinamente las visitas y modificar el régimen carcelario en los próximos días para ir solucionando esto”, precisó Haro Huapaya.
Anunció que las requisas serán más continuas en todos los pabellones, pues se calcula que aún existen más de 120 chips y el mismo número de celulares en el establecimiento penitenciario.
Lea más noticias de la región Lambayeque
Comparte esta noticia