Un total de mil toneladas de basura se dejarán de recoger en dos días.
La ciudad de Chiclayo, en la región Lambayeque, seguirá sucia, no solo porqué los obreros decidieron ratificar su paro de 48 horas, sino porque las 30 compactadoras, camiones y volquetes de basura no cuentan con combustible para al menos recoger los desperdicios acumulados cerca a los colegios, mercados y hospitales.
El secretario general de los obreros, Segundo Zambrano, lamentó la poca capacidad de las autoridades locales para gestionar el pago de sus haberes, pese a la promesa hecha en presencia de los representantes del Ministerio Público.
“Nosotros seguimos en protesta y no saldremos a trabajar hasta que nos cancelen todos nuestros pagos atrasados. Además no hay combustible y no podemos mover ninguna máquina”, indicó a RPP Noticias.
El dirigente lamentó que las calles de la ciudad permanezcan inundadas de desperdicios y basura que podrían generar un foco de contaminación, y responsabilizó de todo esto a la mala gestión actual.
Según informó se han dejado de recoger hasta ahora 500 toneladas de basura en el primer día de lucha.
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