Las playas más concurridas en la Costa Verde fueron Agua Dulce, Las Sombrillas y Los Yuyos, pese a la emergencia sanitaria declarada por el Gobierno. En tanto, en la playa Cantolao, en el Callao, muchas personas continuaron a pesar de prohibición.
Decenas de familias asistieron a las playas de Chorrillos y del Callao, pese a las recomendaciones del Gobierno de evitar los lugares concurridos como medida para mitigar la propagación del nuevo coronavirus (COVID-19).
RPP pudo comprobar que, durante la tarde, las personas seguían llegando a la playa Cantolao, en el distrito chalaco de La Punta, pese a la emergencia sanitaria declarada en nuestro país.
Este sábado, el Gobierno regional del Callao anunció el cierre de las playas que se encuentran en esta provincia. Se han colocado unas cintas amarillas a fin de alertar a los veraneantes, pero muchos ingresaron de todos modos.
"Considero que es irresponsable de mi parte y de muchas personas sabiendo que estamos en peligro por el coronavirus, pero a la hora que hemos venido no teníamos ningún aviso. Vimos una franja amarilla, pero no nos prohibieron el ingreso", dijo una mujer que había ido con sus parientes.
Uns situación similiar se vivió en la playa Agua Dulce, en en el distrito limeño de Chorrillos, a donde bañistas y surfistas llegaron para disfrutar de un día de mar.
Si bien las playas de la Costa Verde no han sido restringidas, el propio presidente Martín Vizcarra hizo más temprano un llamado a los peruanos para que permanezcan en sus casas este fin de semana.
Las playas más concurridas en esta zona fueron Agua Dulce, Las Sombrillas y Los Yuyos. Por la tarde, muchos de los visitantes se retiraron; sin embargo, otros prefirieron armar sus carpas para pasar la noche con familiares o amigos.
A diferencia del Callao, no se ha colocado cartes o cintas amarillas para alertar sobre el riesgo en estas playas, ni hay personal que informe que recomiende evitar los lugares donde se concentra gran cantidad de personas.
El pasado miércoles, el Gobierno declaró emergencia sanitaria a nivel nacional por un plazo de 90 días como parte de las medidas que adopta el Ejecutivo para mitigar la propagación del nuevo coronavirus COVID-19.
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