Presidente de Bolivia llegó por la tarde a la ciudadela inca en compañía de sus hijos, generando la sorpresa de los turistas que se tomaron varias fotos con él.
El presidente de Bolivia, Evo Morales Ayma, calificó de “hermoso” el paisaje y la majestuosidad que envuelve a la ciudadela inca de Machu Picchu, la cual recorrIÓ junto a sus dos hijos, como parte de su tercer día de visita al departamento surandino de Cusco.
“(La ciudadela inca) ha sido un centro de rebelión, tiene paisajes hermosos, representa la cultura andina y latinoamericana. Estoy sorprendido”, expresó en declaraciones a la Agencia Andina.
El mandatario ingresó al santuario arqueológico al promediar las 15:45 horas bajo estrictas medidas de seguridad y ante la sorpresa de los turistas que también disfrutan a estas horas de la belleza del complejo arquitectónico.
Antes de iniciar el recorrido, Morales Ayma recibió una amplia orientación de la historia de Machu Picchu a cargo de un guía, quien absolvió las interrogantes planteadas por el presidente boliviano.
Tras la explicación, el presidente ingresó el santuario y se tomó fotografías con sus hijos teniendo como fondo Machu Picchu, una de las siete nuevas maravillas del mundo moderno.
Los turistas aprovecharon su visita para tomarse fotografías con él, quien en todo momento lució bastante contento.
Machu Picchu, enclavada en la cima de una montaña que domina el cañón del río Urubamba, constituía un centro de culto, de observación astronómica y hacienda privada de la familia del inca Pachacútec.
Ostenta el título de Patrimonio Cultural y Natural de la Humanidad de la Unesco desde 1983 y fue elegida como una de las siete nuevas maravillas del mundo en 2007 tras una votación por internet promovida por la fundación New 7 Wonders.
Evo Morales en Perú
El mandatario boliviano visitó el viernes diferentes atractivos turísticos de la ciudad del Cusco, después de sostener un encuentro con su homólogo peruano, Ollanta Humala Tasso.
Morales Ayma fue declarado el jueves huésped ilustre por el municipio provincial de Cusco, y recibió también una vara de mando incaica en una ceremonia realizada en el salón de conferencias de la comuna cusqueña.
Como parte de su visita a la Ciudad Imperial suscribió con su colega peruano la Declaración del Cusco, en la que acuerdan cooperar para eliminar la desigualdad social, abogan por la solución pacífica de controversias y se comprometen a materializar los convenio de Ilo.
ANDINA
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