Debido a la ausencia de la Fiscalía y de efectivos de la Unidad de Trata de Personas, no se pudo tener acceso a las habitaciones.
Tras dos días de haberse hecho pública la denuncia de la presencia de menores de edad en el hospedaje Toro Bravo, ubicado en la ciudad de Iquitos (región Loreto), cuya propietaria es la madre del congresista Víctor Grandez, hoy (martes) llegó a dicho local personal del área de Comercialización de la Municipalidad Provincial de Maynas y de la comunidad distrital de San Juan Bautista.
Junto a efectivos de serenazgo, el gerente de Comercialización de la comuna de Maynas, Eduardo Campos y el representante de la gerencia de Comercialización del distrito de San Juan, se realizó el ingreso al lugar para constatar si la documentación de funcionamiento se encontraba en regla.
Debido a la ausencia de la Fiscalía y de efectivos de la Unidad de Trata de Personas, no se pudo tener acceso a las habitaciones.
Luego de comprobarse de que la documentación estaba en regla y observar algunas deficiencias como la de no contar con el registro de huéspedes, los funcionarios municipales se retiraron del lugar.
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