La sétima hija de la humilde campesina Santos Rubio Reyes (43) falleció debido a una malformación congénita.
El Hospital de Apoyo Leoncio Prado de Huamachuco, ubicado en la provincia liberteña de Sánchez Carrión, donó un ataúd para la bebé que nació muerta debido a una malformación congénita. El cuerpo estuvo en una caja de cartón debido a que los padres carecen de recursos para darle sepultura.
La bebé es el sétimo hijo de Santos Rubio Reyes (43) quien, el pasado miércoles 29 de mayo, tuvo que caminar una hora desde su vivienda ubicada en el caserío Rayambal, en el distrito Curgos, para poder dar a luz en la posta médica. Sin embargo, debido a complicaciones, tuvo que ser trasladada de inmediato al nosocomio de Huamachuco.
En el lugar, el personal de Salud intervino con carácter de emergencia a la paciente debido a que la bebé ya estaba muerta dentro de su vientre.
El pequeño cuerpo fue colocado durante dos días en una caja de cartón hasta que la administradora Sandra Asto y la asistenta social Rocío Guevara dispusieron la donación del ataúd.
La Beneficencia Pública de Sánchez Carrión también cedió un nicho para enterrar a la bebé.
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