La tía del adolescente de 13 años denunció que pandilleros han tomado control del asentamiento humano Nuevo Progreso en Villa María del Triunfo y el alcalde no hace nada.
La inseguridad reina en el asentamiento humano Nuevo Progreso en el distrito de Villa María del Triunfo (VMT), desde que pandilleros han tomado el control de la zona y agreden físicamente a los lugareños.
En diálogo con RPP, Gisela Jerónimo, indicó que su sobrino se salvó de morir tras recibir cinco puñaladas en el pulmón derecho y presentar fracturas en la cabeza y moretones en los pies.
La víctima identificada como Joel Canales de 13 años se recupera en el hospital María Auxiliadora luego de la salvaje golpiza a la que fue sometido, según contó su familiar.
"Él solo salió a comprar huevos y refresco, pero lo agarraron en la puerta de su casa y lo arrastraron para luego golpearlo", relató la indignada mujer.
Agregó que su cuñado, al percatarse de lo ocurrido al muchacho quiso intervenir, pero los pandilleros le apuntaron con un revólver.
Gisela Jerónimo denunció que el alcalde de Villa María del Triunfo no hace nada por la seguridad de los vecinos de su zona. De igual forma, manifestó, hay una indiferencia de la Policía y del serenazgo. "No hacen nada. Preguntan: ¿Qué hay?, quieren gasolina y vuelven cuando ya el hecho está consumado", señaló.
En diálogo con RPP, Gisela Jerónimo, indicó que su sobrino se salvó de morir tras recibir cinco puñaladas en el pulmón derecho y presentar fracturas en la cabeza y moretones en los pies.
La víctima identificada como Joel Canales de 13 años se recupera en el hospital María Auxiliadora luego de la salvaje golpiza a la que fue sometido, según contó su familiar.
"Él solo salió a comprar huevos y refresco, pero lo agarraron en la puerta de su casa y lo arrastraron para luego golpearlo", relató la indignada mujer.
Agregó que su cuñado, al percatarse de lo ocurrido al muchacho quiso intervenir, pero los pandilleros le apuntaron con un revólver.
Gisela Jerónimo denunció que el alcalde de Villa María del Triunfo no hace nada por la seguridad de los vecinos de su zona. De igual forma, manifestó, hay una indiferencia de la Policía y del serenazgo. "No hacen nada. Preguntan: ¿Qué hay?, quieren gasolina y vuelven cuando ya el hecho está consumado", señaló.
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