El pequeño, quien sufrió quemaduras en el 85% de su cuerpo tras explotar dos balones de gas, dejó de existir de un paro cardiaco el pasado miércoles 13 de mayo.
Su cuerpecito no resistió. Tras varios días de tratamiento, el pequeño Sebastián Ramírez Montenegro falleció de un paro cardiaco en el hospital de Cincinnatti, en los Estados Unidos.
El niño de tan solo tres años de edad, tenía graves quemaduras en el 88% de su cuerpo tras explotar dos balones de gas en el distrito limeño de Puente Piedra.
Su tío, Freddy Barrera, a través del Rotafono de RPP, solicitó ayuda a la Cancillería peruana para acelerar el proceso de repatriación del niño quien dejó de existir el pasado miércoles 13 de mayo.
"Pido a la cancillería de Perú en Chicago a facilitar los medios posibles para que Sebastián vuelva a su patria y a su distrito para velarlo", dijo.
Se prevé que el menor sea sepultado en el cementerio Jardines del Buen Retiro, en el distrito de Puente Piedra.
Como se recuerda, el pequeño fue trasladado hasta el hospital de Cincinnati, en donde recibió tratamiento, en una ambulancia avión con el apoyo económico de la empresa petrolera Repsol.
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