Olivia Arévalo fue asesinada el pasado jueves de cinco disparos al pecho afuera de su vivienda en la comunidad intercultural Victoria, Gracia, ubicada a 20 minutos de la localidad de Yarinacocha, en la región Ucayali.
Fuentes del Ministerio Público confirmaron a RPP que la Policía encontró y desenterró este sábado el cadáver del canadiense Sebastian Paul Woodroffe, sospechoso de asesinar a la lideresa shipibo konibo Olivia Arévalo el pasado jueves.
La lideresa indígena fue asesinada de cinco disparos al pecho a las 12:30 en la comunidad intercultural Victoria, Gracia, ubicada a 20 minutos de la localidad de Yarinacocha, en la región Ucayali.
Fuentes de la Fiscalía también adelantaron que el domingo llegará al lugar un equipo especializado para esclarecer la identidad del fallecido. Sin embargo, vecinos de la comunidad ya habían identificado al cadáver como Woodroffe.
Linchamiento a sospechoso
Desde el jueves, circulaba en redes sociales un video en que el se observa a un grupo de pobladores de Yarinacocha linchar y ahorcar a un hombre señalado como el ciudadano canadiense, horas después del asesinato de Arévalo.
La Defensoría del Pueblo condenó este hecho el sábado a través de su cuenta en Twitter. "La Defensoría del Pueblo expresa su rotundo rechazo ante el linchamiento y homicidio del presunto autor del asesinato de la lideresa indígena Olivia Arévalo. Pedimos a las autoridades una profunda investigación", dice el mensaje.
El viernes, la viceministra de Interculturalidad, Elena Burga, declaró al canal TV Perú que las autoridades tenían como principal sospechoso del asesinato de la líder indígena a un canadiense e investigaban el móvil del crimen.
La versión de que Arévalo fue asesinada por un canadiense también fue difundida por la organización Servindi, dedicada a la comunicación intercultural, que citó a representantes de organizaciones de indígenas que dieron esa información. Asimismo, señaló que testigos indicaron que el presunto asesino hizo cantar a Arévalo un "ícaro" (canto de curación), tras lo cual disparó contra la lideresa indígena.
Rechazo
Arévalo era una reconocida defensora de los derechos culturales del pueblo shipibo-konibo y fue asesinada cuando se encontraba en su casa en la comunidad de Victoria Gracia, en la región de Ucayali, según la Federación de Comunidades Nativas de Ucayali y Afluentes (Feconau).
El viernes, el jefe del Consejo de Ministros, César Villanueva, afirmó que estaba "muy consternado" por este asesinato y afirmó que "no quedará impune".
Las organizaciones que integran el Foro Social Panamazónico (Fospa) también lamentaron y condenaron en un comunicado el crimen y afirmaron que se trató de "un nuevo feminicidio político".
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