En diferentes lugares y circunstancias estas personas intentaron quitarse la vida, aparentemente por problemas familiares.
Dos menores y una mujer adulta que ingirieron veneno, en diferentes lugares y circunstancias, fueron salvados por los médicos del hospital de Andahuaylas (Apurímac), donde permanecen internados.
Se trata del menor O.C.C., de 12 años, en el distrito de Talavera; J.R.S., de 16 años, en San Jerónimo y Santosa Quispe Quispe, de 35 años, en la comunidad de Champaccocha, quienes fueron trasladados por sus respectivos familiares hasta el hospital, con el diagnóstico de intoxicación por sustancia fosforada.
Según las primeras investigaciones, en el caso de los menores, estos habrían tomado la fatal decisión por problemas con sus padres; mientras que la mujer lo hizo tras discutir con su pareja.
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