En la Ciudad Blanca son más de 11.300 taxistas que forman parte de patrulleros cívicos en un programa que funciona hace 7 años.
Las personas que recorren diariamente, durante las 24 horas del día, las calles arequipeñas se convirtieron en los mejores informantes y aliados de la Policía Nacional para luchar contra la delincuencia.
Hablamos de los taxistas, hombres al volante que en su diario trabajo por llevar el sustento a sus hogares, también contribuyen con la sociedad al formar parte del programa de Participación Ciudadana Patrulleros Cívicos de la Policía Nacional, que funciona en Arequipa desde el año 2004.
Pero no solo contribuyen capturando delincuentes, sino informando sobre choques de vehículos, atropellos y emergencias en general.
“Todo lo que el taxista informa a la policía es verdad”, manifestó el jefe del programa mayor Fredy Calle Barberena, quien detalló que un gran porcentaje de las llamadas que se reciben a la central 105 son falsas, lo que no ocurre con los patrulleros cívicos.
Estadísticas
En la Ciudad Blanca son 11 mil 300 taxistas que forman parte de este programa y participaron en el presente año en más de mil 800 intervenciones ayudando a la policía a capturar a 29 delincuentes y recuperar 35 vehículos de los 37 robados.
“Si no se logró recuperar los otros dos carros es porque los afectados avisaron muy tarde y los delincuentes lograron esconder la unidad”, afirmó el mayor Calle.
Funcionamiento
Este programa funciona a través de un sistema de comunicación interconectado con las 34 empresas que pertenecen al programa, la central de emergencia 105 de la Policía Nacional y Serenazgo, entidades que cuentan con una frecuencia de radio especial para comunicar de inmediato cualquier suceso.
Cada taxista cuenta con un radio móvil en su vehículo que le permite comunicar de cualquier hecho, participar en la captura de delincuentes y recuperar vehículos robados.
Solicitados por empresas
Para poder ser parte de este programa, la empresa de taxi debe ser formal y el conductor no debe tener antecedentes penales, ni policiales; y la población puede identificarlos porque tienen un sticker pegado en el parabrisa que lo califica como PATRULLERO CÍVICO.
Esto ha permitido que empresas y la propia población requiera los servicios de los taxistas cívicos.
Por: Janet Vizcardo
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