Pandilleros no respetaron el valor histórico de los muros que acompañan las calles Cori y Cuesta de la Amargura, entre el Valle San Cristóbal y la Plaza de Armas.
Muros históricos de palacios incas fueron maltratados y pintarrajeados por jóvenes vándalos en el centro monumental del Cusco.
Las paredes de piedra que adornan las calles Cori y Cuesta de la Amargura entre el Valle San Cristóbal y la Plaza de Armas hoy se exhiben profanadas con grafitis y otras inscripciones, informó América Noticias.
Vecinos del lugar señalaron que la zona se ha convertido en punto de reunión a partir de las ocho de la noche de pandilleros que liban licor y fuman marihuana, incluso esconden su mercancía entre las piedras.
Lo más sorprendente es que apenas a una cuadra se encuentra la comisaría central de Sapi. Es decir, los vándalos hacen de las suyas a la vista y paciencia de las autoridades.
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