La falta de agua en la zona impidió controlar el fuego y rescatar a los pequeños.
En medio de dramáticas escenas de dolor son velados los restos de los hermanitos de dos años y 8 meses que murieron calcinados al incendiarse su rústica vivienda en el distrito santeño de Coishco por una vela encendida.
Carmen Huacacolqui Ruíz, de 35 años, llora desconsoladamente sobre los ataúdes de sus pequeños que no pudieron ser rescatados a tiempo de las llamas que redujeron a cenizas su vivienda, situada en el asentamiento humano Ampliación Corazón de Jesús por falta de agua.
“En mi casa no tengo luz y coloqué una vela, pero me quedé dormida. Lo que siento no sé cómo explicarlo, he perdido a mis dos hijitos”, refirió la progenitora mientras las lágrimas inundaban su rostro.
Desde hace 20 días, los pobladores de este sector no cuentan con el servicio de agua potable , por lo que ante esta emergencia tuvieron que usar la poca agua que tenían para controlar el incendio.
La desconsolada madre de familia pidió ayuda a las autoridades para reconstruir su vivienda y alimentarse.
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