Joven tenía 20 años y cayó en depresión luego que personal del Ejército Peruano no sancionara a soldados que le provocaron golpes en la cabeza por lo que tuvo que ser operado y permaneció internado en hospital Militar.
El exsoldado del Ejercito Peruano, Dennys Paredes Cayo de 20 años, se quitó la vida al interior de su vivienda en el distrito de Socabaya, tras sufrir una fuerte depresión. Según sus familiares él buscaba justicia tras quedar con la mitad del rostro inmovilizado luego de recibir una golpiza en el cuartel de Tiabaya el 2016.
Su madre, Marlene Cayó, contó a RPP que su hijo era víctima de bullying y que el 15 de diciembre del 2016, cayó de cara al pavimento luego de que sus propios compañeros lo empujaran mientras realizaban una actividad física.
"Nadie auxilió a mi hijo en su momento. Cuando reaccionó, tuvo que prestarse un celular de un amigo para avisar lo ocurrido. Estaba con el rostro destrozado. Todo este tiempo mi hijo estaba triste", contó la madre.
Dennys fue llevado al hospital militar, donde recibió tratamiento durante más de un año. Era el mayor de sus hermanos y soñaba con ser policía, pero después de la agresión quedó deprimido. Nunca se sancionó a sus agresores.
Su madre pide justicia para encontrar al responsable o responsables que llevaron a Dennys a tomar esta decisión.
RPP Noticias trató de comunicarse hasta en tres oportunidades con algún representante del Ejército, sin embargo no recibimos ninguna respuesta.
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