Cientos de cajamarquinos acuden masivamente al Cementerio General

En Cajamarca aún se mantiene la tradición de visitar a los difuntos, el 2 de noviembre, esta fecha es considerada como el “Día de los Difuntos” o de “Todos los Santos”, por ello los cajamarquinos acuden con las tradicionales ofrendas y velar a sus seres queridos, los cuales ya no se encuentran en este mundo.

Los cajamarquinos pidieron a los funcionarios de la Beneficencia Pública, encargados de la administración del cementerio general, se les brinde todas las facilidades, para visitar con tranquilidad a sus difuntos.

A la vez indicaron que se deben abrir todas las puertas del Cementerio General, habilitar todos los grifos para no tener problemas con el abastecimiento del agua, colocar una mejor señalización, además instalar un mayor número de tachos de basura.

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El bautizo de un bollo, una tradición de Todos los Santos

En Cajamarca el bollo es un muñeco, hecho con masa de pan o de azúcar,  adornado con una serie de colores, pero lo que llama la atención es el famoso bautizo de estos muñecos, los cuales son hechos con tal realismo, que los padrinos organizan toda la fiesta, en las fechas que se celebra Todos los Santos.

A decir de Dolores Ayay Chilón, presidente de la Academia Regional Quecha de Cajamarca, el bautizo del bollo es una tradición que con el pasar de los años se está perdiendo, pues los jóvenes prefieren otras actividades; sin embargo, la tradición aún perdura en las personas mayores.

El Bautizo se lo realiza con la presencia de una persona que se disfraza de cura, y realiza una actividad litúrgica, ante él los supuestos padres, junto a los padrinos se acercan con el bollo, y les pregunta por el nombre que le van a colocar, luego de pasarles el agua bendita los declara bautizados.

En la fiesta de Todos los  Santos, el bollo cobra especial importancia, porque es un muñeco que no solo se lo bautiza, sino también los padres regalan a sus hijas, quienes le colocan un vestido, un pantalón, de acuerdo al gusto y empiezan a jugar con ellos.

Los padrinos, después de la fiesta ya quedan como compadres reales y a partir de ese momento el respeto es el que prima entre ellos, como si hubiesen bautizado a un niño real.

En medio de la fiesta se inicia con el reparto de los famosos capillos (presentes que se colocan en pecho de los asistentes), donde se grafica la fecha, el nombre de los padrinos y padres, además del bollo al que bautizaron.

El bautizo de un bollo en Cajamarca hoy en día, lamentablemente ya no se ve como antes, donde el vecino, el amigo, el conocido se reunían para hacer el famoso bautizo, con el devenir del tiempo, esta tradición se va perdiendo.

Por: Luis Asencio
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