Cusco: No se registran muertes por COVID-19 en personal de salud que se vacunó

Desde la aplicación de la vacuna de Sinopharm a personal de salud, realizada hace tres meses en Cusco, no se han registrado muertes de trabajadores de este sector por COVID-19, según informó la Gerencia Regional de Salud (GERESA).

Según comunicó el organismo, entre febrero y marzo de este año, alrededor de 13 mil personas de instituciones públicas y privadas que integran la primera línea de batalla contra el nuevo coronavirus, recibieron las dosis asignadas por el Ministerio de Salud.

Javier Ramírez, director de Inteligencia Sanitaria de la GERESA Cusco, explicó que “la cantidad de contagios (en trabajadores del sector salud) ha disminuido y ya no hemos tenido fallecidos”, señaló al ser consultado por RPP Noticias.

Disminuyeron casos graves

A los resultados alentadores se suma la confirmación sobre la reducción del número de personal de salud que llega a la Unidad de Cuidados Intensivos tras contagiarse con la COVID-19 en la región.

“Antes teníamos muchos médicos hospitalizados en UCI, al momento eso se ha reducido al mínimo”, confirmó el médico Juan Spelucín, gerente regional de Salud y presidente del comando regional COVID-19.

Más vacunas para el personal de salud

La Gerencia Regional de Salud Cusco confirmó el arribo de un nuevo lote de 6 mil dosis de Sinopharm, que llegarán entre el jueves y viernes de esta semana, las cuales serán destinadas a trabajadores de salud independientes.

Además, se anunció el inicio de la vacunación al personal de la Compañía de Bomberos de Cusco, quienes requerirán entre 700 u 800 dosis para su inoculación.

Decesos en mayores de 80 años

La disminución del número de decesos también se registra en la población adulta mayor, que recibió la vacuna de Pfizer. Según el médico Ramírez, la tasa de mortalidad en adultos mayores de 80 años se redujo. La vacunación de este grupo etario se efectuó en abril de este año.

Sin embargo “se mantiene la mortalidad en la población de 50 y 60 años”, dijo el jefe de Inteligencia Sanitaria, quien atribuyó los decesos al descuido e incumplimiento de protocolos de bioseguridad en este grupo etario.