Negocio abrió sus puertas pese a haber sido clausurado definitivamente por la comuna hace unos días.
Pese a haber sido clausurado definitivamente, las puertas del bar “Mi Facultad”, ubicado en la avenida Larco, fue reabierto por sus propietarios, razón por la cual la Municipalidad Provincial de Trujillo procedió a sancionarlo por desacato.
Esta acción se realizó tras un operativo ejecutado por la comuna en la cual se verificó que el negocio seguía funcionando pese a que días atrás fue cerrado por no contar con licencia de funcionamiento y constantes quejas de vecinos por el excesivo ruido, desorden público y actos contra el pudor generado por asistentes al bar.
Hay que indicar que en el mismo operativo se inició el proceso sancionador contra una discoteca que no contaba con licencia y a una bodega por vender bebidas alcohólicas sin autorización.
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