Unas 20 familias serían las afectadas por los olores fuertes de yodo y cloro
Pobladores del cuarto sector de Nuevo San Lorenzo en el distrito de José Leonardo Ortiz, Chiclayo, rechazan la presencia de una fábrica clandestina de sal en la zona, y exigen a las autoridades el cierre de la misma.
Según informan los vecinos, esta fábrica tiene dos años de permanencia en la zona y afecta la integridad de unas 20 familias apostadas alrededor.
“El ambiente huele a cloro, el olor es insoportable, nuestra ropa en los cordeles se impregnan de yodo, nuestros niños ya tienen problemas respiratorios y los ancianos también tienen problemas de salud”, precisó Alejandro Suyón Rodríguez.
Agregó que esperan la pronta reacción de las autoridades.
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