La esposa de Napoleón Tarrillo fue testigo del crimen y pidió a la Policía Nacional capturar a los responsables
El teniente gobernador del caserío “El Mirador” del distrito chiclayano de Chongoyape, Napoleón Tarrillo Astonitas (50), fue torturado y estrangulado en su propia vivienda, por cuatro personas desconocidas.
Entre lágrimas, su esposa Flor Vallejos Rodas (36) narró que los atacantes irrumpieron y los golpearon a ambos; pero el ensañamiento mayor lo tuvieron con su esposo, pues lo amarraron de pies y manos, lo golpearon con un palo y ahorcaron.
“Te han mandado a matar, nos han pagado para matarte, decían los hombres. A mí me amarraron, taparon la boca y cubrieron con una frazada, diciéndome que si me movía, me eliminaban. Yo escuché los gritos de dolor de mi esposo, nadie nos ayudó”, expresó.
Manifestó que Tarrillo Astonitas era constantemente amenazado de muerte por dos personas, ya que se oponía a la invasión de tierras comunales y depredación del Área de Conservación Privada Chaparrí, ubicada en Chongoyape. “Él no pidió garantías, pues nunca pensó que llegarían al extremo de liquidarlo de manera tan salvaje”, acotó.
Acompañada de sus familiares pidió justicia y que se ubique a los responsables. El cuerpo lo trasladaron hasta la sede de la morgue de Chiclayo. Será trasladado hasta su natal Chota (Cajamarca) para ser sepultado.
Investigaciones. El jefe de la Región Policial de Lambayeque, coronel Rubén Jerí Juscamaita precisó que se investiga el caso y el personal especializado ya trabaja para dar con el paradero de los autores del crimen.
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