Estudiantes y sus padres desafían las heladas y suben cerros de hasta 4 mil metros de altura en la provincia Azángaro.
Pese a las heladas, un grupo de 12 escolares acompañados de sus padres caminan más de 10 kilómetros, en el centro poblado de Cañicuto, distrito de San Antón, provincia de Azángaro (región Puno), en busca de señal de internet para recibir sus clases a distancia.
Los escolares salen de sus casas muy temprano para ir a pie hasta el cerro Occopampa, ubicado a 4 mil metros sobre el nivel del mar y desafían el intenso frío.
Al llegar a lo más alto del cerro, captan la señal de telefonía e Internet y reciben los mensajes de los maestros para atender sus clases, cumplir sus tareas y enviar sus trabajos.
Según las madres de familia, sus hijos no cuentan con útiles escolares para desarrollar sus tareas, debido a que la cuarentena, por el nuevo coronavirus, los tomó por sorpresa y no pueden ir al pueblo de la zona.
Los padres de familia piden a las autoridades locales, regionales y al presidente de la República, que se amplíe el servicio de Internet en las zonas alejadas de la región de Puno, para que sus hijos no pierdan clases.
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