El partido aprista exigió que se corrobore las afirmaciones de Miguel Atala, quien dijo a la fiscalía que fue testaferro de Alan García. Indican que si Jorge Barata no incrimina al exmandatario, “por qué creer esta nueva versión de un involucrado en pagos ilícitos interesado en evadir la prisión”.
El Partido Aprista Peruano sostuvo el martes que los investigados por los presuntos sobornos de la empresa Odebrecht optaron por el fácil camino de echarle la culpa al fallecido expresidente Alan García para evitar ir a la cárcel.
A través de un comunicado de la Dirección Política, sostiene que una vez fallecido el líder aprista “inmediatamente cambian su versión para salvar su responsabilidad”.
Sostiene que Miguel Atala, quien se acogió a la confesión sincera y declaró haber actuado como testaferro del expresidente García en los pagos que recibió de Odebrecht, mintió una vez cuando dijo que el dinero depositado en su cuenta de Andorra provenía por la venta de un terreno.
Atala declaró al fiscal José Domingo Pérez que el exmandatario le dijo que el dinero depositado en su cuenta de la Banca Privada de Andorra (1.3 millones de dólares) era para él y le pidió que se lo entregue en partes. La cuenta, según dijo Atala, se abrió a pedido de Luis Nava, en colaboración con la empresa Odebrecht, para agilizar los pagos pactados por Luis Nava, ex secretario de la Presidencia en el segundo gobierno de Alan García.
"Nueva versión"
Al respecto, la Dirección Política del Apra dice que Atala “ya había recurrido a la cobardía de culpar a un muerto”, al señalar que su exsocio Yamil Tali fue quien abrió la cuenta en Andorra. “Hoy reconoce que fue él y su hijo”, afirma.
El Apra exige, en ese sentido, que se corrobore escrupulosamente las afirmaciones dadas por el colaborador porque si Jorge Barata no incrimina a Alan García, “por qué creer esta nueva versión de un involucrado en pagos ilícitos interesado en evadir la prisión”.
Además de Atala, se acogió también a la confesión sincera José Antonio Nava Mendiola, hijo de Luis Nava, quien dijo haber sido testigo de los sobornos en efectivo que Jorge Barata entregaba a su padre.
El Poder Judicial dictó esta noche arresto domiciliario por 36 meses para Miguel Atala. Tras su confesión, dijo tener temor por las represalias que pueda tomar la “fuerza de choque” que habría en el Partido Aprista Peruano.
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