Walter Chinchay, abogado del suboficial FAP Víctor Ariza Mendoza, acusado de espiar para Chile, sostuvo en RPP que su defendido ha aceptado todos los cargos que se le imputan.
"Él quiere un proceso justo y que lo juzguen como debe de ser", afirmó Walter Chinchay, abogado del suboficial FAP Víctor Ariza Mendoza, acusado de espiar para Chile.
En los estudios de RPP, sostuvo que su defendido "está llano a someterse a la justicia militar" pese a que está consciente a que en este fuero las penas por el delito de traición a la patria son más severas.
Sin embargo, el letrado refirió que Ariza Mendoza podría acogerse a beneficios respecto a la graduación de la pena, toda vez que él colabore en el proceso. En tal sentido, aprovechó para advertir que "habría vinculación de personas ya sea por omisión o por negligencia", al cuestionar que al agente se le investigaba desde el 2007 pero recién se le detuvo el 2009.
Sostuvo que el acusado ha reconocido todos los delitos y se ha declarado culpable. "Sabe que lo van a procesar, que lo van a condenar, que va a una tener pena", anotó.
Al ser consultado sobre que su patrocinado habría actuado solo o tuvo cómplices, Walter Chinchay precisó que él deduce tras haber leído el expediente, que "podrían haber más personas involucradas".
Vida de Ariza no peligra y trato en penal es exclusivo
La defensa del espía confeso descartó que la vida de Víctor Ariza corra algún riesgo, y en ese sentido confirmó que el Instituto Nacional Penitenciario (INPE) viene adoptando fuertes medidas de seguridad para garantizar la seguridad del agente.
"Cuenta con todas las garantías de ley. No me puedo quejar para nada del ministro de Justicia (Aurelio Pastor) ni del INPE porque quizá el tratamiento es exclusivo en todo aspecto. Para nada corre en riesgo su vida", aseguró en diálogo con RPP:
Sobre la condición emocional de Ariza volvió a comentar que lo encuentra deprimido, derrotado, por lo cual en momentos ha tenido que asumir a parte de su defensa, el "papel de amigo y confesor espiritual".
Comentó que lo que le ha dado fuerza al espía peruano, ha sido reencontrarse con su esposa, con quien tras haber estado separado por cinco años han retomado la relación.
De otro lado, refirió que María Flores, esposa de Ariza, es quien paga sus servicios. Agregó que no cobra demasiado por su defensa.
En los estudios de RPP, sostuvo que su defendido "está llano a someterse a la justicia militar" pese a que está consciente a que en este fuero las penas por el delito de traición a la patria son más severas.
Sin embargo, el letrado refirió que Ariza Mendoza podría acogerse a beneficios respecto a la graduación de la pena, toda vez que él colabore en el proceso. En tal sentido, aprovechó para advertir que "habría vinculación de personas ya sea por omisión o por negligencia", al cuestionar que al agente se le investigaba desde el 2007 pero recién se le detuvo el 2009.
Sostuvo que el acusado ha reconocido todos los delitos y se ha declarado culpable. "Sabe que lo van a procesar, que lo van a condenar, que va a una tener pena", anotó.
Al ser consultado sobre que su patrocinado habría actuado solo o tuvo cómplices, Walter Chinchay precisó que él deduce tras haber leído el expediente, que "podrían haber más personas involucradas".
Vida de Ariza no peligra y trato en penal es exclusivo
La defensa del espía confeso descartó que la vida de Víctor Ariza corra algún riesgo, y en ese sentido confirmó que el Instituto Nacional Penitenciario (INPE) viene adoptando fuertes medidas de seguridad para garantizar la seguridad del agente.
"Cuenta con todas las garantías de ley. No me puedo quejar para nada del ministro de Justicia (Aurelio Pastor) ni del INPE porque quizá el tratamiento es exclusivo en todo aspecto. Para nada corre en riesgo su vida", aseguró en diálogo con RPP:
Sobre la condición emocional de Ariza volvió a comentar que lo encuentra deprimido, derrotado, por lo cual en momentos ha tenido que asumir a parte de su defensa, el "papel de amigo y confesor espiritual".
Comentó que lo que le ha dado fuerza al espía peruano, ha sido reencontrarse con su esposa, con quien tras haber estado separado por cinco años han retomado la relación.
De otro lado, refirió que María Flores, esposa de Ariza, es quien paga sus servicios. Agregó que no cobra demasiado por su defensa.
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