Analista Agustín Figueroa señaló que el presidente sufrirá daños en percepción ciudadana, si no define posición ante errores de su entorno, como en el caso Chehade.
Los primeros 100 días del gobierno de Ollanta Humala se han caracterizado por chantajes desde diferentes flancos contra la administración nacionalista, consideró el analista político Agustín Figueroa.
“Existen chantajes contra el Gobierno, ¿de dónde vienen? (…) De la gran minería formal y la gran minería informal, el contrabando, la droga. Todos estos elementos que perturban nuestra sociedad tienen representantes, mueven gente, cierran carreteras, toman minas”, advirtió.
Corrupción
En diálogo con RPP Noticias, señaló también que es una tarea pendiente del Gobierno la lucha contra la corrupción que fue “una promesa y una premisa de su campaña” y que no hubo una respuesta adecuada ante las denuncias que involucran a personas cercanas a la gestión.
En similar línea, indicó que “ha habido mucha falta de experiencia y desubicación personal”, incluso “metidas de patas”, de integrante del Gobierno. Sin embargo, los diversos escándalos de estos primeros 100 días todavía no afectan al mandatario, anotó.
“El presidente tiene todavía teflón, como se dice en el nuevo argot político peruano. Los errores de su gente todavía no lo están afectando, pero si no toma actitudes definidas, si no se de define claramente una sanción contra Chehade, esto le va a restar puntos y en el futuro le va a causar problemas”, manifestó.
Por lo expuesto, Figueroa observó que el caso del vicepresidente de la República, Omar Chehade, es una “prueba de fuego” para Humala Tasso.
Además, dijo que los diferentes sectores agrupados en el nacionalismo evidencian “bastante incoherencia y poca planificación”. Por eso, indicó que se requiere la “voz de mando” del jefe de Estado.
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