Esta formación profesional se canalizará a través del programa Beca 18 y antes de iniciar el servicio militar, informó el presidente Ollanta Humala.
El Gobierno implementará un mecanismo para que los jóvenes de entre 16 y 17 años que deseen hacer su servicio militar puedan estudiar una carrera en un instituto superior tecnológico antes de empezar la vida castrense, anunció este lunes el presidente Ollanta Humala.
Esta formación profesional se canalizará a través del programa Beca 18 y en el marco de la nueva doctrina de defensa nacional planteada por el Perú, adelantó el Jefe del Estado en declaraciones a la prensa brindadas en Arequipa.
La formación durará entre dos o tres años, antes de que el joven inicie el servicio militar propiamente dicho. “Con eso mejorará la calidad de nuestras Fuerzas Armadas y al final del servicio militar tendrán el conocimiento de una carrera tecnológica y la disciplina militar”, indicó el mandatario.
Esto, remarcó, permitirá que dichos jóvenes cuenten “con mejores herramientas para defender que las que tienen ahora los licenciados”, y terminada esta etapa de sus vidas los soldados podrán desempeñarse como técnicos o emprendedores.
De igual manera, Humala Tasso dijo que a partir del 1 de enero próximo se creará la especialidad de instructores de idiomas para el personal técnico de suboficiales de las Fuerzas Armadas. De esta manera, ellos podrán enseñar esta materia en los cuarteles al personal de tropa.
“Por primera vez en el Perú, los oficiales saldrán hablando dos idiomas”, resaltó.
NUEVA DOCTRINA DE DEFENSA
El presidente de la República sostuvo que todo esto se enmarca en la nueva doctrina de defensa nacional promovida por el Gobierno, la cual, afirmó, se centra en la formación del personal humano antes que en la compra de armamento.
El Jefe del Estado señaló que Perú defiende esta posición en la undécima reunión de ministros de Defensa de las Américas, que se celebra en Arequipa y que inauguró este lunes.
“Hemos planteado que se reflexione en torno a las doctrinas de defensa nacional, pues parece que estas las hacen los vendedores de armas”, indicó al referir que las doctrinas parecen descansar "sobre la base de quién compra el avión o el tanque más nuevo y más caro”.
Incurrir en ello representaría para los países latinoamericanos “un desbalance presupuestal en el desarrollo social y frente a los problemas en saneamiento, educación y salud”, apuntó.
En tal sentido, la propuesta peruana es la de “nacionalizar nuestra doctrina en base a nuestras condiciones materiales de existencia”.
“Si queremos tener una doctrina disuasiva dependiente del mercado internacional del armamento, vamos muertos, pues no hay economía que la pueda sostener”, señaló.
Por ello, estimó que “el principal instrumento disuasivo de una Fuerza Armada es el soldado, el hombre, y por eso planteamos que la doctrina de defensa nacional sea revisada sobre el criterio de la capacitación profesional de nuestra gente”, indicó.
Andina
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