El presidente de la Comisión de Educación, Daniel Mora, refirió que un marco normativo bien preciso permitirá que no se generen malas interpretaciones que motiven una "cacería de brujas" contra personas inocentes.
El presidente de la Comisión de Educación, Daniel Mora, consideró importante avanzar en el debate para tener una Ley del Negacionismo, con todas las precisiones necesarias, para evitar que grupos seudemocráticos irrumpan en las aulas y en la vida política peruana.
Refirió que según informaciones que maneja la Comisión de Educación, habría una primera lista de 250 maestros que cumplieron sus sentencias por terrorismo y que nuevamente estarían enseñando en diversas escuelas del país.
“Hay una lista de 250 maestros que cumplieron condenas y ahora dictan clases, y creemos que son más. Además se ve el trabajo que hacen estos señores del Movadef, Conare–Sutep. En ese sentido, es pertinente avanzar en una ley del negacionismo bien precisa, afinada”, señaló a la Agencia Andina.
Refirió que un marco normativo bien preciso permitirá que no se generen malas interpretaciones que motiven una “cacería de brujas” contra personas inocentes.
“Todo lo que ayude a que nuestro país entienda claramente lo que significó el terrorismo para nuestro país es sumamente positivo, pero hay que tener mucho cuidado en su aplicación”, agregó.
Para el legislador de la Alianza Parlamentaria es importante depurar del sistema educativo a las personas sentenciadas por terrorismo y por ello, resaltó que la Ley de Reforma Magisterial también contemple ese objetivo.
En el proyecto de ley presentado por el Poder Ejecutivo, se pide sancionar con penas no menores de cuatro ni mayores de ocho años al que “públicamente apruebe, justifique, niegue o minimice los delitos cometidos por integrantes de organizaciones terroristas”
Mora advirtió que las personas afines a Sendero Luminoso realizan un trabajo silencioso y se ubican en sectores estratégicos como centros de estudios para hacer su labor de propaganda.
“La democracia tiene que protegerse, ya hemos tenido nosotros experiencias nefastas, tenemos que no ser tan inocentes; es cierto que creemos en la libertad de expresión y pensamiento, pero no pueden alimentar los cerebros de nuestros hijos con ideas transnochadas”, acotó.
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