"Lo importantes es que Fujimori no tiene una enfermedad terminal ni grave que ponga en riesgo su vida", expresó el congresista Jaime Delgado.
El vocero de Gana Perú, Jaime Delgado, sostuvo que es inapelable la decisión presidencial de no concederle el indulto humanitario a Alberto Fujimori, y dijo esperar que la familia del exmandatario acepte lo dispuesto “sin seguir manoseando el tema”.
Recordó que la negación de otorgar esta gracia presidencial fue una decisión del jefe del Estado, Ollanta Humala, basándose en informes técnicos, es decir, considerando las sugerencias de la Comisión de Gracias Presidenciales del Ministerio de Justicia, y no de forma arbitraria.
Delgado señaló que en las últimas semanas el fujimorismo había desarrollado una campaña para ejercer presión sobre la decisión en torno al indulto humanitario, con audios y mensajes del exmandatario desde su prisión, pero ello –añadió- no influyó en lo absoluto.
“Lo importantes es que Fujimori no tiene una enfermedad terminal ni grave que ponga en riesgo su vida. Esos elementos fueron tomados en consideración”, declaró el también parlamentario oficialista en TV Perú.
Asimismo, expresó que espera que la bancada de Fuerza Popular en el Congreso de la República no tenga una reacción política a la negativa del indulto, pues “no es conveniente tensionar más las cosas cuando país quiere estabilidad para la gobernabilidad”.
“Hay que ser prudentes y dejar de seguir manoseando este tema que no es bueno para el propio Fujimori”, añadió el legislador, al comentar que, en relación a este caso, Gana Perú iba a respetar la decisión del presidente Humala, así esta hubiese sido favorable al indulto.
Jaime Delgado enfatizó que, pasado este tema, es momento de dar paso a asuntos de interés nacional y de debate, como las reformas electorales, el proyecto de ley del servicio civil, entre otros que se discuten en el Legislativo.
El presidente Ollanta Humala dio a conocer el viernes su decisión no ejercer sus facultades para conceder el indulto humanitario solicitado a favor del exmandatario Alberto Fujimori (1990-2000), condenado a 25 años de prisión por delitos de corrupción y contra los derechos humanos.
La decisión se basó en las recomendaciones de la Comisión de Gracias Presidenciales, que aconsejó no conceder el indulto, tras evaluar las condiciones de salud y carcelarias de Fujimori, recluido en la Dirección de Operaciones Especiales (Diroes).
El 10 de octubre de 2012, los hijos del exmandatario presentaron un pedido de indulto por razones humanitarias, argumentando principalmente criterios médicos sobre todas las patologías de las cinco cirugías a la que fue sometido su padre.
Dicho documento incluyó también las opiniones de los doctores que integraron la junta médica que evaluó a Fujimori a lo largo de su tratamiento.
ANDINA
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