Ministro Thorne: La caja militar policial está quebrada, ´no insistan´

El ministro de Defensa, Jaime Thorne, rechazó la posibilidad de que el Estado inyecte una suma de dinero para reactivar la caja militar-policial, como exige un sector de las Fuerzas Armadas que considera inviable que el Estado reciba a perpetuidad toda la responsabilidad pensionaria del personal castrense.

"La caja está quebrada, no tiene sentido insistir en esas cosas. Olvidémonos de la caja, hagamos una institución, partamos de cero, hagamos una cosa ordenada...todo dentro de una política macro, esto no puede poner en peligro el resto de los sectores y el resto de las finanzas públicas. No tiene sentido reactivarla", expresó en RPP Noticias.

Ante los cuestionamientos al proyecto de ley presentado por el Ejecutivo al Legislativo, que reforma las remuneraciones y el sistema previsional para el personal y los pensionistas de los institutos militares, dijo que este es solo un proyecto pero que la discusión debe seguir, y "lo correcto es que se debata en el próximo Congreso".

Indicó que el Ejecutivo envió el criticado proyecto, para cumplir con obligaciones legales que imponía la Ley de Presupuestos, que mandaba presentarlo a más tardar el 2 de julio. "No se quería incumplir con la ley".

Por su parte, José Villena, funcionario del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), afirmó que no se puede solo hablar de la caja porque el régimen previsional de los militares no es solo de 37 mil pensionistas sino que hay otros 65 mil, que ya son administrados por el Estado.

Indicó que cuando se creó la caja, se planteó que el aporte debía ser de 27% y que la rentabilidad debía ser permanente de 14% por año, "cosa que nunca fue" por fallas de gestión.

En respuesta a otros cuestionamientos, aseguró que el Estado siempre cumplió con sus aportaciones. "El Estado no le debe un sol a la caja", aseguró.

No obstante, reconoció que ante el despilfarro ejecutado por el ex asesor presidencial Vladimiro Montesinos, el Estado -a manera de garantía- asumió a 65 mil pensionistas del año 1974 para adelante y desde el año 2005 viene inyectando dinero.

Afirmó que la reserva previsional que necesita la caja es de 90 mil millones, y "el robo representa un 5% de lo que necesita para ser autofinanciable". 

 Advirtió que el problema radica en que "el efecto perverso de la caja" es la cédula viva, "porque cualquier incremento de la remuneración a un activo, automáticamente debe ser incrementar al pensionista, aún si este no ha aportado".