¿Quién le está pagando´, se preguntó el exministro del Interior sobre la situación del asesor brasileño. También criticó la intervención del consejero presidencial Adrián Villafuerte.
El analista político Fernando Rospigliosi expresó su preocupación porque no se sabe con claridad quién le paga el sueldo al asesor presidencial Luis Favre, ya que -según sus estimaciones- estaría cobrando entre 20.000 a 30.000 dólares mensuales y no el tope de 15.000 soles que percibe un alto funcionario del Estado.
"No me preocupa que sea extranjero si sabe hacer bien las cosas (...) Pero sí cuando hay cosas oscuras, como quién le está pagando", sostuvo en RPP Noticias. Además, dijo no conocer a Favre en persona, pero lo considera uno de los principales artífices del triunfo electoral del presidente Ollanta Humala, porque "demostró cualidades muy importantes" como asesor en la campaña.
Luego criticó al exasesor de la PCM Carlos Tapia por no decir nada en contra del asesor brasileño durante la campaña. "Lo que pasa es que hay peleas internas por el poder. Está desbordándose. Esto estalla por el tema de Conga (proyecto minero)", explicó.
Rospigliosi puso mayor énfasis al caso del coronel EP (r) Adrián Villafuerte, consejero del mandatario Ollanta Humala en temas de defensa y orden interno. "Me preocupa mucho más. Lo ha corroborado Tapia: hay una participación militar que hace seguimiento e interceptaciones telefónicas", señaló el analista.
También comentó que la Dirección Antidrogas de la Policía (Dirandro), de la cual Villafuerte buscaría su control según una denuncia periodística, cuenta con sofisticados equipos de interceptación telefónica desde el 2007.
"Si (estos equipos) son bien usados, no habría problema. Es normal que los tenga para luchar contra el crimen organizado, pero si vemos una intervención oscura y siniestra, hay que preocuparnos", indicó el exministro del Interior.
Como se recuerda, Carlos Tapia acusó a Villafuerte, amigo del presidente Humala, de destruir el partido Nacionalista, y de estar involucrado en actos de seguimiento y chuponeo en su contra.
De otro lado, Rospigliosi consideró que el Gobierno está definiendo un rumbo, por lo que aquellas personas que no están de acuerdo han renunciado y "a otras las están echando". "La situación está llevando a una separación inevitable", subrayó.
En ese sentido, cree que deben producirse cambios en el Gabinete Ministerial por las "notorias fallas del Gobierno en ciertas áreas y contradicciones insalvables".
"Esto que han hecho en el Ambiente es increíble. Filtrar un informe contrario a la política del Gobierno (...) Esto ha dado más armas y más fuerza a los revoltosos. Lo que está ocurriendo en Cajamarca es una pérdida de control del Estado absurda. La huelga, el sábado y domingo, estaba en el suelo y era la ocasión de ocupar el territorio y evitar que pequeños grupos generen violencia", expresó.
Comparte esta noticia