El presidente del PPC explicó la postura de su partido respecto del indulto y dijo que Fujimori debía pedir disculpas por sus delitos.
Para el presidente del Partido Popular Cristiano (PPC), Alberto Beingolea, el presidente Pedro Pablo Kuczynski (PPK) no actuó con honestidad al indultar a Alberto Fujimori y aseguró que tendrá que explicar por qué tomó esta decisión.
“El presidente de la República debe ser honesto, debe parecer honesto y en esta figura del indulto PPK no lo pareció. Tiene que dar muchas explicaciones, debe quedar mayor constancia de la transparencia de cómo se dio el indulto”, dijo el exparlamentario en Todo Se Sabe de RPP Noticias.
"Todos buscaron sus intereses y nadie pensó en el Perú"
Beingolea criticó la posición que adoptaron las diferentes fuerzas políticas durante la crisis por el debate de vacancia a PPK y dijo que se necesita políticos que prioricen al país antes de sus intereses. “Necesitamos una fuerza política que diga el Perú primero y después los intereses partidarios. Producidos los hechos lo primero que reclamamos es vamos a poner al Perú primero a los que gobiernan, pónganse a gobernar de una vez y a los que no les tocó cumplan la tarea que la Constitución les encomendó, pero pensando en los intereses de la patria y no en los particulares”.
El exparlamentario comentó que la Corte Suprema se debe pronunciar por las condiciones en la que se otorgó la gracia al expresidente Fujimori, debido a que en la Constitución se mencionan plazos que explicó, no se habrían respetado. Agregó que el Estado peruano también tendrá que sustentar su decisión también a nivel internacional.
Arrepentimiento y reconciliación
Respecto a la posición del expresidente Alberto Fujimori tras el indulto, el presidente del PPC comentó que no notó arrepentimiento en la declaración que dio el exmandatario. Agregó que en búsqueda de la reconciliación que propone el Gobierno, Fujimori debería reconocer sus delitos y mostrar un arrepentimiento real.
“Se trata de unos delitos por los cuales ha sido condenado y perdonado, por tanto supone un comportamiento que vaya en esa línea la de un delincuente perdonado, que impone una serie de obligaciones que esperamos se cumplan. Todo esto pensando en la reconciliación nacional de la que tanto se habla y de la que se hace poco. La reconciliación no pasa por hacer renuncias sino por dar pasos hacia adelante avanzar en un acto de reconciliación que pasa por el reconocimiento y que cada uno haga lo que tiene que hacer”.
Comparte esta noticia