La próxima semana se realizará la segunda votación de este dictamen de ley que también propone la cadena perpetua para los violadores de menores de 14 años.
El pleno del Congreso aprobó, en primera votación, la castración química para violadores de menores de 14 años. Esta medida será complementaria a la cadena perpetua y a consideración de un juez. El proyecto de ley será sometido a una segunda votación definitiva la próxima semana.
Esta mañana, el Pleno debatió un dictamen de ley que reúne unos 20 proyectos de ley que proponen modificar el Código Penal para fortalecer la prevención y sanción de los delitos contra la libertad sexual.
Las iniciativas fueron presentadas por congresistas de distintas bancadas: Acción Popular, Apra, Frente Amplio, Fuerza Popular, Peruanos por el Kambio, Nuevo Perú y Alianza Para el Progreso.
El presidente de la comisión de Justicia, Alberto Oliva, dijo que entre los principales cambios que se proponen al ordenamiento jurídico está la cadena la cadena perpetua para los violadores de menores de 14 años, además de la imposición de la castración química cuando el juez lo considere conveniente.
La castración química
El artículo Nº 173 del Código Penal y del Código de Ejecución Penal, referido a la pena contra los violadores de menores de hasta 14 años, quedaría así:
"El que tiene acceso carnal por vía vaginal, anal o bucal o realiza cualquier otro acto análogo con la introducción de un objeto o parte del cuerpo por alguna de las dos primeras vías, con un menor de catorce años, será reprimido con pena de cadena perpetua.
Se impondrá como medida complementaria la castración química cuando el juez lo estime pertinente."
La votación se realizó por cada párrafo y por separado. El Congreso aprobó por unanimidad (103 votos) incluir la pena de cadena perpetua. El párrafo referido a la castración química fue aprobada también en primera votación con 67 votos a favor, 7 en contra y 28 abstenciones. Sin embargo, todo el artículo quedó pendiente de segunda votación para la próxima sesión.
La castración química frena la producción de testosterona, la hormona sexual masculina que está distribuida en un 90 % en los testículos y 10 % en las glándulas suprarrenales.
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