Thorne: “Las personas decentes no chantajeamos ni nos dejamos chantajear”

El ministro de Economía, Alfredo Thorne, acudió la mañana de este viernes al Pleno del Congreso para explicar el contexto de la conversación que tuvo con el contralor Édgar Alarcón y que fue grabada en su despacho. Según señaló en su presentación previa a las intervenciones de los legisladores, ni él ni su asesor son responsables de los audios.

"Les aseguro que ni mi asesor ni yo grabamos dicha conversación. (…) A muchos congresistas no parece preocuparles el hecho de que un ministro de Estado haya sido grabado subrepticiamente. Más de dos docenas de congresistas de la mayoría han pedido mi renuncia o advertido mi censura sin siquiera escuchar primero mis explicaciones. Las personas decentes no chantajeamos ni nos dejamos chantajear", dijo.

El contexto. El diálogo entre Thorne y Alarcón ha generado cuestionamientos. Según la denuncia que valida gran parte del Congreso, el ministro condiciona el incremento presupuestal de la Contraloría a la aprobación del proyecto del Aeropuerto de Chinchero, que por entonces se encontraba en un proceso de auditoría. En el Congreso, el titular de Economía admitió que en la reunión se trató el tema de Chinchero, pero sostuvo que sus frases han sido malinterpretadas.

"En ningún momento el presidente de la República me ha instruido en pedirle al contralor nada sobre el proyecto de Chinchero. (…) Entiendo que algunas frases mías, fuera de contexto, puedan malinterpretarse. Lo último que me imaginaba es que mis palabras iban a ser clandestinamente grabadas. Si no, claramente, hubiese sido mucho más preciso para evitar malas interpretaciones. Pero aun así, en ningún caso presioné al contralor ni condicioné el presupuesto de Contraloría al informe de Chinchero", afirmó.

El ministro de Economía añadió que no puede seguir en su cargo "si las decisiones de la mayoría parlamentaria no muestran el mismo compromiso".