La educación básica regular enfrenta uno de sus mayores desafíos en plena segunda ola de la COVID-19. Con las Elecciones 2021 por resolverse, ¿cuáles son los problemas a solucionar que debe tener en cuenta el próximo presidente?
En un cerro de la comunidad de Tumuyo, del distrito de San Antón, en la provincia de Azángaro, región Puno, dos niños intentan captar señal digital para recibir clases virtuales mientras se abrigan con una frazada en medio de una granizada. Esta imagen refleja la realidad de la educación básica regular en el Perú, sobre todo fuera de la capital. En plenas Elecciones 2021 es importante conocer cuáles son los puntos flacos en materia de educación. ¿A qué debería estar atento el próximo presidente o la próxima presidenta?
La brecha digital sigue siendo enorme. La COVID-19 ha obligado a los estudiantes a recibir clases a distancia, pero, según la Asociación para el Fomento de la Infraestructura Nacional (AFIN), se proyecta un déficit de 30 mil antenas en todo el país para el año 2025. A esto se suma que solo el 40.1% de los hogares peruanos tiene Internet, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI).
Para el especialista en educación Paul Neira, a estos indicadores de la brecha digital que tiene el país, debe sumarse un análisis sobre los niveles de competencias de los docentes para generar conocimiento a través del uso de la tecnología.
“En la Encuesta Nacional de Docentes del 2018, la más cercana que tenemos, los docentes declaran una percepción de que la tecnología puede ser una herramienta muy importante para poder hacer clases, pero al mismo tiempo declaran que no tienen capacitación [en tecnologías de la información]. Esto nos permite entrar en una discusión más allá de la conectividad e infraestructura en términos de la brecha digital para entrar a elementos más complejos que tienen que ver con el manejo de competencias”, comenta.
Sobre el tema de las tablets, que recién se están terminando de entregar, Neira consideró que esta debe complementarse con gestiones del Ministerio de Transportes y Comunicaciones para aumentar la infraestructura con las antenas en las zonas que lo necesitan y capacitación docente constante, debido a que el contenido precargado de estos dispositivos para zonas sin internet no aseguraría la interacción entre el docente y el estudiante.
LA SITUACIÓN DE "APRENDO EN CASA"
"Aprendo en casa" es la primera experiencia del Estado como estrategia educativa centrada en el soporte tecnológico de internet, radio y televisión para el dictado de clases. No obstante, el Minedu reportó cifras preocupantes: en el 2020, 230 mil alumnos de primaria y secundaria salieron del sistema educativo y 200 mil estudiantes de secundaria matriculados no están accediendo a este servicio.
Para el 2021 se ha anunciado la continuación de la plataforma Aprendo en Casa y el posible regreso a clases presenciales. En ambos casos, el próximo presidente o la próxima presidenta heredará el trabajo y tendrá que reforzarlo.
Daniel Alfaro, ex ministro de Educación, sostiene que es necesario seguir fortaleciendo la estrategia de Aprendo en Casa. "Se tiene que fortalecer las competencias de los alumnos y los profesores para sacarle el máximo y evitar, sobre todo, la exclusión en el sistema educativo".
Alfaro agrega que es importante hacer seguimiento a los alumnos que culminan con la Educación Básica Regular, debido a que “[solo] 3 de cada 10 alumnos que salen del colegio ingresan a educación superior y esa es una brecha de desarrollo importante en el país, esta brecha se ha estado cerrando, pero podría ampliarse tras esta pandemia”.
LOS CIMIENTOS DE LA EDUCACIÓN
Previo a la emergencia sanitaria, las cifras oficiales ya anunciaban una situación poco favorable de la infraestructura educativa. Según el Ministerio de Educación, 89% de locales de educación inicial fueron identificados como inadecuados en cuanto a su infraestructura y acceso a servicios. En colegios de primaria la cifra llega al 94%, en secundaria al 89% y en colegios de educación básica especial al 91%.
“Tenemos locales escolares en muchos lugares del país a los que no llega ningún otro servicio y muchas veces la debilidad en la dotación en infraestructura y equipamiento está asociada a los terrenos donde se ubican", sostiene César Guadalupe, investigador en educación de la Universidad del Pacífico.
"Esto tiene también que ver con cómo organizamos mejor la prestación de servicios educativos. Se necesita un esfuerzo muy importante de planificación con una mirada territorial donde los agentes locales puedan tomar mayores decisiones de las que pueden tomar hoy. Para estimar el tamaño del problema, se requiere que empecemos a abordarlo desde una perspectiva distinta a la centralista de los últimos años”, agrega.
Por otro lado, Paul Neira agrega que el presupuesto de mantenimiento de los locales escolares y sus servicios “no se ha implementado correctamente y ahora la solución implicaría, en muchos casos, destruir colegios y volverlos a construir. Esto genera otros problemas como los costos y la migración de estudiantes a otros colegios”.
Neira recomienda canalizar las lecciones que deje la pandemia respecto a la calidad de las clases virtuales y contrastarlas con los puntos de mejora del sistema educativo que ya se conocen para realizar una inversión eficiente de renovación de la infraestructura educativa más rápida, priorizada y que considere las necesidades particulares de cada localidad del interior del país.
LOS PROFESORES Y LA CARRERA MAGISTERIAL
En educación básica regular el nivel del docente es tan importante como la infraestructura de las escuelas. Para fortalecer las habilidades de los maestros, su calidad de vida y de trabajo; así como mejorar el sistema educativo, en el 2007 se publicó la Ley de Carrera Pública Magisterial.
Esta norma propuso el desarrollo profesional del maestro, luego de haber culminado la formación inicial docente, con escalas y evaluaciones, introduciendo el concepto de mérito. Hugo Díaz, integrante del Comité Nacional de Educación, indica que cuando se elaboró esta norma, su recomendación fue realizar 3 reformas: en la formación del docente, en adaptar la gestión de procesos a la carrera docente y la presupuestal por la escala de remuneraciones y una política de incentivos.
“Lo que sucedió es que ninguna de las 3 reformas que se reclamaron se dieron mientras la carrera se puso en marcha. Indudablemente hubo algunos logros, pero con grandes limitaciones que llevaron a la reforma del 2012”, explica Díaz.
En el 2012 la medida sufrió cambios a través de la Ley de Reforma Magisterial y, entre otros cambios, se amplió la escala magisterial de 6 a 8 posiciones, cada una con mejores condiciones salariales según evaluación de méritos.
Por otro lado, en los últimos años el sueldo base de los maestros ha ido incrementándose constantemente, llegando a la fecha a 2 mil 300 soles mensuales por una jornada de 30 horas para un docente de la primera escala. Sin embargo, esta cifra representa 200 soles menos que lo que gana un trabajador con estudios universitarios completos, según el INEI.
Sobre una posible solución a la problemática salarial de los maestros, Daniel Alfaro indica que se debería "establecer una forma de financiamiento de tal manera que en el tiempo podamos hacer incrementos graduales del piso salarial hasta llegar al promedio de lo que un asalariado con estudios universitarios gana mensualmente. Y que a partir de ese momento uno pueda, efectivamente a través de los exámenes de ascenso, ir generando mayores posibilidades de incrementos salariales".
También agrega: "entonces los maestros que lleguen al nivel 8 podrían situarse a la par con los profesionales mejor pagados en el país”. Alfaro considera que con mejores condiciones la carrera docente sería mejor valorada, tendría mejores capacitaciones y que, en el futuro, se atraería al mejor profesional posible con vocación de servicio y expectativas de desarrollo personal".
Hugo Díaz destaca también la importancia de mejorar la gestión en el sistema educativo en lo que respecta a la simplificación de procedimientos y la confianza en la capacidad de los profesores. “En realidad los profesores que innovan son pocos en el país porque las sanciones para los que se salen de la norma son grandes. Cuando uno le pregunta a algún maestro que ha ganado algún concurso cómo ha podido innovar, una de las respuestas más comunes es que ganó porque la UGEL está lejos del centro educativo donde trabaja”.
Un sistema de educación de calidad para alumnos y docentes es importante para reducir las diferentes brechas que tiene el país. El próximo mandatario debe estar atento y tener propuestas claras para solucionar estos problemas.
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