El ministro de Justicia y Derechos Humanos, Fernando Castañeda, sostuvo que la implementación de estos dispositivos plantea una alternativa a los jueces a fin de que cambien su visión carcelaria por una pro persona. Agregó que los magistrados tendrán la facultad de determinar si un interno incumple las medidas restrictivas que conllevan la aplicación de grilletes.
Los grilletes electrónicos cambiarán la cultura carcelaria en el sistema judicial del país y además contribuirán con el deshacinamiento de los recintos penitenciarios, según indicó este domingo el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Fernando Castañeda.
La implementación de estos dispositivos se da gracias al decreto legislativo 1514, emitido a inicios de junio, en el que también se dispuso que por primera vez en la historia del sistema penitenciario se adquieran 8 000 grilletes con un presupuesto de 50 millones de soles.
En esa línea, Castañeda indicó que ahora espera que el Poder Judicial cambie “su visión carcelera por una visión pro persona”, mediante la cual se establezca la reclusión solo para casos excepcionales y justificados.
“La idea es que se convierta en una opción previa a la prisión por parte de los jueces y cambiar la cultura actual de prisión por medidas alternativas”, dijo el titular del MINJUSDH a la agencia Andina.
Castañeda también recordó que desde 2017 existe una norma sobre el uso de grilletes, pero esta considera que el interno debe costear su adquisición. Al respecto, dijo que es por esto que solo 25 internos accedieron a esta medida y destacó que con la norma actual, es el Instituto Nacional Penitenciario (INPE), quien asume el costo y ya no el interno.
Indicó también que el INPE tiene un sistema de monitoreo, el cual buscan fortalecer. Además dijo que la determinación para que un interno use los grilletes pasa necesariamente por los jueces y serán estos quienes podrán revocar la medida en caso el interno incumpla las restricciones.
El Ejecutivo aprobó el pasado 4 de junio un decreto legislativo (N° 1514) que optimiza la aplicación de la medida de vigilancia electrónica (grillete) personal como medida coercitiva personal y sanción penal a fin de reducir el hacinamiento en los penales debido a la emergencia sanitaria por la COVID-19.
Esta norma sostiene que el juez, de oficio o a pedido de parte, puede convertir la pena privativa de libertad en pena de vigilancia electrónica personal en los siguientes casos:
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