En Enfoque de los Sábados, el titular del Mincetur, Roberto Sánchez, se pronunció así tras explicar los puntos del documento 'Consenso por el Perú', el cual fue entregado ayer al presidente del Congreso.
El titular del Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur), Roberto Sánchez, insistió hoy en la necesidad de regular la vacancia presidencial por incapacidad moral y la cuestión de confianza para acabar con la crisis política que atraviesa el país desde hace años.
En Enfoque de los Sábados, el ministro recalcó que la propuesta figura en el documento denominado ‘Consenso por el Perú’, el cual entregó el presidente Pedro Castillo al titular del Congreso, José Williams, durante la reunión que sostuvieron ayer, viernes 16 de setiembre, en la sede legislativa.
Sánchez señaló que, en los últimos dos años, el Ejecutivo y el Legislativo han estado conviviendo en un clima de tensión. Mientras el Congreso se esmera en no gastar su “bala de plata”, en referencia a una eventual denegación de la confianza a un Gabinete Ministerial, el Gobierno se ha enfocado en defenderse de pedidos de vacancia por la causal de incapacidad moral.
A su criterio, es inviable conducir las riendas del país en medio de este panorama, por lo que exhortó al Legislativo a aprobar los proyectos de ley que ha enviado el Ejecutivo para regular ambos mecanismos.
“Hay encrespamiento cuando se habla de censuras al Gabinete y al premier. Mucho se habla de la bala de plata u oro, se dice que el Ejecutivo quiere cerrar el Congreso y no se puede trabajar. Eso significa regular la cuestión de confianza, pero en el otro lado significa regular la vacancia presidencial por incapacidad moral”, manifestó.
“La crisis es de un sistema político en fragmentación total”, agregó.
En ese sentido, Roberto Sánchez explicó que el documento ‘Consenso por el Perú’ se redactó con el fin de acabar con la inestabilidad política.
“Es un documento que expresa la voluntad y la vocación de decir: ‘Pongámonos de acuerdo, el Perú primero’”, finalizó el titular del Mincetur, al decir que es hora de que el Congreso y el Gobierno “jueguen el partido con la misma camiseta”.
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