En la grabación el expresidente de la Corte Superior del Callao, Walter Ríos, da cuenta que le pidió a Manuel Soto Gamboa para favorecer laboralmente a su esposa Maritza Sánchez en dicha cartera.
Un nuevo audio difundido por Cuarto Poder revela que el expresidente de la Corte de Justicia del Callao, Walter Ríos, hizo gestiones para favorecer laboralmente a su esposa Maritza Sánchez en el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos (Minjus).
En una conversación telefónica, Ríos Montalvo, que actualmente cumple 18 meses de prisión preventiva en el penal Ancón I, le explica a su pareja, que se desempeña como defensora pública en dicha cartera desde junio de 2015, que habló con el secretario general del Ministerio de Justicia, Manuel Soto Gamboa, para que la titular de la Jefatura Nacional de Defensa Publica le dé su respaldo. "No te preocupes hijita, no te puedo decir todo con puntos y comas, tienes todo el apoyo, nadie te va a mover", se le escucha decir.
En otro momento del diálogo, le aseguró la renovación de su contrato que vencía el 31 de julio de este año. "Lo único que quiero hermano, le dije al secretario general que es recontra pilas, con el que vamos a cenar, está por confirmar el sábado, que no la fastidien, que la dejen ahí", indica el investigado por presuntos actos de corrupción y tráfico de influencia, así como vinculaciones con organizaciones criminales que operan en el Callao.
El audio muestra también que el extitular de la Corte de Justicia del Callao le señala la posibilidad de que un funcionario superior con quien labora sea despedido. "El otro pata que me ha llevado donde él (en referencia a Manuel Soto), le dijo: oye, pero hermano, hay que botarlo a ese pata, pues. 'Ya, hay que darle un mes', me dice. 'Se sigue portando mal, lo sacamos, ¿ya?'".
Actualización 1-7-2021
Mediante una carta notarial, el señor Manuel Soto Gamboa informa que a través de la Resolución Ministerial N° 148-2020-JUS de fecha 4 de junio del 2020, emitida por el Ministerio de Justicia, en su artículo 1, se le absuelve de los cargos imputados porque no existir pruebas fehacientes que lo sustenten.
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