El empresario y expresidente del Club Regatas está implicado en los sobornos al exgobernador del Cusco Jorge Acurio.
La Fiscalía incautó una cuenta en el Banco Interamericano de Finanzas (Banbif), por un monto aproximado de un millón treinta y dos mil dólares, vinculada a Gustavo Salazar Delgado. El empresario tiene una orden de prisión preventiva en su contra por ser parte del presunto soborno que Odebrecht le habría pagado al exgobernador del Cusco, Jorge Acurio Tito.
Según las primeras indagaciones, Acurio pidió un pago de 3 millones de dólares a la empresa brasileña a cambio de otorgarles la buena pro de la Vía Evitamiento de esa ciudad en el año 2013. El soborno final habría sido de 1 millón 200 mil dólares y para este fin se habrían valido de un contrato ficticio entre dos empresas: Klienfeld, una offshore vinculada a Odebrecht y Wircel S.A., esta última de propiedad de Salazar. A través de esta transacción el dinero de la coima habría sido entregado a la autoridad regional.
Los indicios. Según las pesquisas fiscales, el nombre de Salazar aparece también en las agendas de Acurio Tito, donde se escribió un subtítulo denominado 'Amigos potenciales de la capital' en el que hay una serie de nombres que tienen que ver con este soborno.
Dentro de otras anotaciones de Salazar también hay inscripciones sobre montos que se depositaron para su empresa Wircel S.A en un banco de Andorra. Cuarto Poder informó en agosto que la Fiscalía Anticorrupción, liderada por el fiscal Hamilton Castro, ha emitido una solicitud de extradición para el expresidente del Club Regatas en base a colabores eficaces y documentos que se incautaron en las oficinas de los involucrados en este caso.
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