Los nipones son conocidos por sus excentricidades, traducidas también al mundo digital.
Es difícil imaginar qué otra industria del ocio puede producir juegos que tienen como objetivo robar la sangre de una familia, encontrar tu alma perdida en una cabeza flotante o simular sueños de gran contenido psicodélico.
Los japoneses han adquirido la fama de ser personas con gustos bastante extraños, que probalmente no tengan acogida fuera de la isla, tal fue el caso del juego Mister Mosquito, que fue un hit a nivel local pero fracasó en los demás locales en el que fue puesto a la venta.
Igual de peculiar es Takeshi´s Challenge, un simulador de vida donde las acciones menos pensadas lograrán avanzar en la trama, donde al final el comediante que inspiró el juego se burla de ti por haberlo terminado.
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