Con el arribo de la TV digital, el tener un televisor de alta definición se está convirtiendo en una necesidad. ¿Qué comprar?, ¿qué nos conviene más?
Con el arribo de la TV digital, el tener un televisor de alta definición se está convirtiendo en una necesidad, a fin aprovechar al máximo las bondades de esta nueva tecnología.
En la actualidad, la lucha por la alta definición está ceñida, primordialmente, entre dos tecnologías: los televisores plasma (PDP: plasma display panel) y los televisores LCD (acrónimo del inglés Liquid Crystal Display).
¿Qué comprar?, ¿qué nos conviene más? La oferta en el mercado es amplia y variada. Pese a su aparente parecido, los televisores plasma y LCD tienen características específicas, y dependerá de cada comprador la decisión a tomar.
Tanto LCD como plasma tienen un perfil muy delgado y son muy ligeros, comparadas a las pantallas CRT (tubos de rayos catódicos) de dimensiones similares. En un principio, era común encontrar televisores plasma de mayor tamaño que los LCD. Sin embargo, en la actualidad la tendencia se ha equiparado.
En cuanto a la calidad de la imagen, ambas tecnologías son sobresalientes. Sin embargo, tienen pequeñas diferencias. Por ejemplo, las televisiones plasma tiene colores más precisos y reales, pero los LCD poseen un mayor brillo y sus colores son más vivaces.
Además, hay que destacar que los plasmas tienen un mejor contraste que los LCD, al punto de ser los únicos que pueden llegar al "negro verdadero". Con estas características, se puede decir que los televisores LCD tienen un mejor desempeño en cuartos iluminados, mientras que los plasma son la mejor opción para lugares oscuros.
Otra importante característica es el ángulo de visión efectivo, lo que permite al espectador disfrutar de las imágenes en pantalla desde cualquier punto, no solo de frente. En ambos televisores, el ángulo de visión ronda los 180 grados.
Sobre el precio, hay una escala paralela entre ambas tecnologías. Sin embargo, el costo de fabricación de los paneles de plasma es inferior al de los LCD para las pantallas de mayor tamaño (a partir de 42 pulgadas). Esto puedo afectar directamente en el precio final del producto.
Sobre la duración del producto, las pantallas LCD tienen una mayor vida útil, en comparación a los televisores plasma, cuyo funcionamiento puede verse afectado en condiciones de altura, ya que posee gases que se modifican por variaciones físicas.
Los televisores LCD consumen menos electricidad, de 100 a 120 W, mientras que los plasma consumen entre 120 a 160 W.
Tanto plasmas como LCD son excelentes alternativas. Sin embargo, al momento de decidir la compra, uno deberá tener en cuenta cuáles son sus necesidades.
En la actualidad, la lucha por la alta definición está ceñida, primordialmente, entre dos tecnologías: los televisores plasma (PDP: plasma display panel) y los televisores LCD (acrónimo del inglés Liquid Crystal Display).
¿Qué comprar?, ¿qué nos conviene más? La oferta en el mercado es amplia y variada. Pese a su aparente parecido, los televisores plasma y LCD tienen características específicas, y dependerá de cada comprador la decisión a tomar.
Tanto LCD como plasma tienen un perfil muy delgado y son muy ligeros, comparadas a las pantallas CRT (tubos de rayos catódicos) de dimensiones similares. En un principio, era común encontrar televisores plasma de mayor tamaño que los LCD. Sin embargo, en la actualidad la tendencia se ha equiparado.
En cuanto a la calidad de la imagen, ambas tecnologías son sobresalientes. Sin embargo, tienen pequeñas diferencias. Por ejemplo, las televisiones plasma tiene colores más precisos y reales, pero los LCD poseen un mayor brillo y sus colores son más vivaces.
Además, hay que destacar que los plasmas tienen un mejor contraste que los LCD, al punto de ser los únicos que pueden llegar al "negro verdadero". Con estas características, se puede decir que los televisores LCD tienen un mejor desempeño en cuartos iluminados, mientras que los plasma son la mejor opción para lugares oscuros.
Otra importante característica es el ángulo de visión efectivo, lo que permite al espectador disfrutar de las imágenes en pantalla desde cualquier punto, no solo de frente. En ambos televisores, el ángulo de visión ronda los 180 grados.
Sobre el precio, hay una escala paralela entre ambas tecnologías. Sin embargo, el costo de fabricación de los paneles de plasma es inferior al de los LCD para las pantallas de mayor tamaño (a partir de 42 pulgadas). Esto puedo afectar directamente en el precio final del producto.
Sobre la duración del producto, las pantallas LCD tienen una mayor vida útil, en comparación a los televisores plasma, cuyo funcionamiento puede verse afectado en condiciones de altura, ya que posee gases que se modifican por variaciones físicas.
Los televisores LCD consumen menos electricidad, de 100 a 120 W, mientras que los plasma consumen entre 120 a 160 W.
Tanto plasmas como LCD son excelentes alternativas. Sin embargo, al momento de decidir la compra, uno deberá tener en cuenta cuáles son sus necesidades.
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