El número de jugadores en simultáneo había bajado del millónn durante los últimos meses en Steam, pero con el nuevo mapa lo ha superado con creces.
PUBG ha tenido un año con altibajos, pero, poco a poco, está recobrando la vitalidad. El videojuego de Bluehole y PUBG Corp. está cerrando el año con más de un millón de jugadores en simultáneo diariamente y todo es gracias a las últimas actualizaciones.
El juego comenzó el año con más de un millón y medio de jugadores en enero (con un pico de 3.2 millones). Sin embargo, el juego mantuvo una tendencia a la baja desde febrero hasta noviembre, llegando solo a los 800 mil jugadores en línea en la plataforma de Gabe Newell. Sin embargo, diciembre ha sido el mes necesario para poder subir en las estadísticas.
Principalmente, el gran empujón que está logrando que PlayerUnknown’s Battlegrounds llegue nuevamente a la cima de Steam es el nuevo mapa Vikendi. El escenario nevado era uno de los más esperados durante todo el 2018 y se ha incluido al battle royale concordando con la Navidad. Asimismo, el Survivor Pass o Pase de Supervivencia con misiones y recompensas ha renovado el interés de los jugadores.
Otro de los factores de este suceso es la finalización exitosa de FIX PUBG. Quien haya jugado PUBG sabe que el videojuego tenía falencias muy graves en la experiencia: bugs, hackers a montón y fallos en cantidad. El número de errores en PUBG hizo que la gente no pueda jugar cómodamente y tenga que buscar nuevas alternativas en el mercado. A pesar de la demora, la compañía logró solucionar un gran lote de estos errores puntuales mediante la campaña y pudo contentar a su base de jugadores.
Por último, la llegada de PUBG a PlayStation 4 también ha mejorado la percepción del usuario sobre el videojuego.
Puedes ver la estadística mensual de Steam Charts de PUBG a continuación:
Playerunknown’s Battlegrounds o PUBG es un juego de disparos y supervivencia que masificó el concepto de “battle royale”, en el cual 100 jugadores luchan por la supervivencia en un espacio decreciente haciendo uso de equipamiento y armas de fuego que pueden ser encontrados en el campo de batalla. Esta fórmula está siendo replicada actualmente por Battlefield y Call of Duty, juego que lanzaron sus modos battle royale en paralelo a sus títulos principales.
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