El popular 'Cachín' estuvo en Colombia para grabar sus escenas como el comisario Condori en Secuestro del vuelo 601 , reciente producción de Netflix.
A mitad de semana, se estrenó en Netflix la serie Secuestro del vuelo 601 y tuvimos la oportunidad de conversar con los protagonistas para conocer detalles de la producción. Compuesta por solo seis capítulos, la serie narra cómo fue la retención de pasajeros entre Medellín y Pereira, convirtiéndose en uno de los hechos que marcó a Colombia al ser el secuestro más largo en su historia.
Si bien está hecha por realizadores colombianos, también cuenta con participación peruana. Los actores nacionales Carlos Alcántara y Gerarld Espinoza aparecen en el capítulo 5 que se titula Odisea aeroespacial. En la producción, el popular 'Cachín' interpreta al comisario Condori, miembro de la Guardia Civil y su compañero el policía Quispe.
La aparición de ambos en Secuestro del vuelo 601 es de un solo episodio, pero son importantes para el desarrollo de la trama. Para grabar la escena estuvieron una semana en Colombia. El actor se mostró feliz de formar parte del elenco y compartió algunas fotos de cómo fue e invitó a los peruanos a que vean la serie
"No se pierdan esta super mega producción, tenemos una pequeña participación muy divertida con mi causa Gerarld Espinoza. Unas actuaciones espectaculares de un gran elenco. ¡Vamos Perú!", se lee en el post de Carlos Alcántara. Por su parte, Espinoza espera que este proyecto abra más camino para los peruanos en Netflix.
"Hay bastantes actores y actrices que podrían, sin problemas, desempeñarse en estás producciones: tienen formación, son constantes, pero no tienen oportunidad de audicionar. Son bastantes, más de los que ven normalmente, casi el 90% nadie los conoce. Espero la disfruten y abra puertas al mercado nacional y sudamericano en general", escribió Espinoza.
¿Cuál es la historia real de Secuestro del vuelo 601?
Es una historia real. El secuestro ocurrió el 30 de mayo de 1973 cuando un avión con 84 pasajeros fue secuestrado por dos individuos que, al abordar en Pereira, obligaron al piloto a dirigirse hacia Aruba. Los autores del secuestro amenazaron con hacer explotar el Vuelo 601 a menos de que el gobierno colombiano libere a 50 prisioneros y les pague un cuantioso rescate en efectivo.
Ante la negativa de negociar, los agresores comienzan a tomar decisiones drásticas que pondrán en vilo la seguridad de los rehenes mientras el avión vuela sin rumbo fijo. En medio del horror inminente, el capitán y dos valientes azafatas debieron luchar para devolver sanos y salvos a los rehenes y burlar a los secuestradores mientras negocian con las autoridades.
El calor sofocante, la angustia mental y emocional son los pilares de la trama de Secuestro del vuelo 601 que los directores -Camilo Prince y Pablo González- quisieron mostrar. La historia detrás de la serie dejó huella en Colombia y, en conversación con RPP, Christian Tappan consideró que "el pueblo peruano comparte muchas similitudes con Colombia en cuanto a cultura y emociones, por lo que estoy seguro de que nuestra serie será muy bien recibida en Perú".
El reto de hacer personajes de la vida real
Secuestro del vuelo 601 tiene como base el libro de Massimo Di Ricco, Los condenados del aire: El viaje a la utopía de los aeropiratas del Caribe, publicado en 2020. En esta obra, el autor recopiló toda la información que había y reconstruyó los hechos. Este fue el punto de partida para todos los involucrados.
Christian Tappan no es ajeno a los personajes que existieron en la vida real, ya lo habíamos visto en El robo del siglo y en Escobar: el patrón del mal; sin embargo, en esta producción, si bien obviamente había un piloto, era un concepto preconcebido por los guionistas por lo que solo se enfoca en ese evento, no como sus protagónicos anteriores que sí conocíamos parte de su historia.
"Este personaje tenía una narrativa y una responsabilidad sobre la historia, porque pues es un avión y termina siendo como el capitán y el líder de esto. Entonces, es un personaje que tuvo la dificultad de ser creado para contar el momento”, dijo a RPP. Para su papel de piloto en Secuestro del vuelo 601, el actor recibió clases de aviación, tuvo un coach que era un piloto y que incluso había conocido al piloto original. Él le contó sobre cómo se comportaban, cómo eran y cómo hablaban en esa época ya que, en los 70, eran considerados como los galanes, los dueños de los cielos.
Te recomendamos
Comparte esta noticia