Jin Joo-dong, un desertor norcoreano que llegó a Corea del Sur en 2022, reveló cómo la guerra entre Ucrania y Rusia ha beneficiado a Corea del Norte, y analizó la relación entre Kim Jong-un y Vladimir Putin.
En un reciente artículo titulado La dictadura de Kim Jong-un sostenida por Estados Unidos, Jin Joo-dong afirmó que Corea del Norte es el país que más se ha beneficiado de la guerra entre Ucrania y Rusia, un señalamiento duro pero cuyo sustento se ve reflejado a lo largo de su análisis. Y es que Joo-dong destacó cómo la inestabilidad militar y la guerra son esenciales para la supervivencia del régimen de Kim Jong-un, que ha apoyado abiertamente a Rusia, mientras culpa a Estados Unidos por la prolongación del conflicto y no mostrar una postura más fuerte.
Apoyo militar encubierto
El apoyo de Corea del Norte a Rusia no se limita a declaraciones políticas. Según informes de la BBC y declaraciones de John Kirby, coordinador de comunicaciones estratégicas del Consejo de Seguridad Nacional, Corea del Norte ha suministrado a Rusia “equipos y municiones” equivalentes a casi 1 000 contenedores en las últimas semanas.
Este suministro de armas y municiones se ha confirmado a través de inscripciones norcoreanas encontradas en los restos de proyectiles disparados contra Ucrania.
En su artículo, Joo-dong también reveló que uno de los regalos que Kim Jong-un recibió de Vladimir Putin a cambio de su apoyo fue un lujoso vehículo blindado de alta gama, conocido como Aurus.
Este “Rolls-Royce ruso” es un símbolo de la estrecha relación entre ambos líderes. Kim Jong-un rechazó la oferta de ayuda alimentaria de Putin y aceptó en su lugar este costoso vehículo, lo que fue condenado por la comunidad internacional como una violación de las sanciones de la ONU.
La manipulación ideológica en Corea del Norte
Jin Joo-dong describe cómo la dictadura norcoreana inculca un odio profundo hacia Estados Unidos desde la infancia, utilizando museos como el de Sinchon para mantener viva la narrativa antiamericana. Este adoctrinamiento justifica la existencia del régimen y refuerza la percepción de amenaza externa constante.
La guerra en Ucrania ha servido como una excusa adicional para culpar a Estados Unidos y desviar la atención de las dificultades internas.
Corea del Norte y Rusia, ambos aislados por la comunidad internacional, han encontrado en la guerra de Ucrania una oportunidad para fortalecer su cooperación, según el desertor.
Rusia ha ignorado las sanciones de la ONU y ha permitido que trabajadores norcoreanos entren en el país en masa, proporcionando a Corea del Norte una fuente crucial de divisas.
Esta alianza ha permitido a Kim Jong-un prometer cooperación política, económica y militar con Rusia, consolidando su posición en el escenario internacional.
La dictadura perpetuada
El artículo de Jin Joo-dong concluye señalando que la existencia de Estados Unidos es fundamental para la legitimidad de la dictadura de Kim Jong-un. Culpar a Estados Unidos por la guerra entre Rusia y Ucrania sirve para mantener el control interno y justificar la represión.
La manipulación histórica y el odio perpetuado son herramientas que la familia Kim ha utilizado durante generaciones para sostener su régimen, y la guerra en Ucrania no es más que otro capítulo en esta larga historia de desinformación y control.
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