Angélica Espinoza brilla en las Paralimpiadas de París 2024 y se consagra como bicampeona paralímpica

Con la mirada del mundo puesta en los Juegos Paralímpicos de París 2024, el Perú celebra con orgullo las victorias de sus paradeportistas. Angélica Espinoza, destacada en esta edición, defendió su título paralímpico en Para Taekwondo, convirtiéndose en la primera bicampeona paralímpica femenina del país.

Espinoza, de 26 años, no solo ha repetido la hazaña que logró en Tokio 2020, sino que ha reafirmado su lugar entre las mejores del mundo. Su reciente victoria en la categoría K44 hasta 47 kg, donde venció a la uzbeka Ziyodakhon Isakova por 10-4, es testimonio de su perseverancia y dedicación.

Este triunfo no fue fácil, después de un receso tras Tokio 2020, Espinoza enfrentó desafíos físicos y mentales que la hicieron reconsiderar su carrera. Sin embargo, con esfuerzo y el apoyo de su equipo, volvió a la cima del podio en París.

La Trayectoria de una campeona

Angélica Espinoza inició su camino hacia el éxito en el deporte paralímpico con su primer oro en Tokio 2020, donde venció a la turca Meryem Cavdar en la final. Este logro fue particularmente significativo, ya que marcó la primera medalla paralímpica para el Perú en 17 años, desde que Jimmy Eulert ganó en Para Natación en Atenas 2004.

A lo largo de su carrera, Espinoza ha acumulado numerosos títulos, incluyendo un subcampeonato mundial y dos medallas de oro en los Juegos Parapanamericanos. Además, ha recibido los Laureles Deportivos en el Grado Gran Cruz, la más alta distinción que un deportista puede recibir en el Perú.

Resiliencia que merece apoyo y reconocimiento

El éxito de Angélica no solo es un logro personal, sino que también resalta la importancia de visibilizar a los deportistas paralímpicos. A menudo, estos atletas no reciben la misma atención que sus contrapartes en los Juegos Olímpicos, a pesar de enfrentarse a desafíos únicos y demostrar un nivel de dedicación y resiliencia que merece reconocimiento.

El programa "Vamos con Tokio" del Instituto Peruano del Deporte ha sido crucial para el apoyo y preparación de estos atletas, brindándoles recursos y financiación adicional para competir al más alto nivel. Gracias a iniciativas como esta, el Perú ha podido aumentar su participación en los Juegos Paralímpicos, con una delegación que ha crecido significativamente desde Río 2016.

Angélica Espinoza no solo es una campeona en el tatami, sino también un símbolo de perseverancia y superación. Su historia inspira a futuras generaciones de atletas y subraya la importancia de continuar apoyando y visibilizando a los deportistas paralímpicos.

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