Se proyecta que las exportaciones de la ‘bebida bandera’ del Perú cerrarán este año en 10.5 millones de dólares, lo que representaría un incremento del 0.2% respecto al año anterior.
¿Sabías que obtener una “Denominación de Origen” (DO) incrementa el valor de un producto al respaldar su calidad y autenticidad? Este concepto hace referencia a un sistema de designación aplicado a productos que provienen de una región geográfica específica, y que se diferencia por características distintivas derivadas de factores naturales, climáticos y métodos de producción tradicionales.
La DO le da a un producto un reconocimiento formal respaldado por un sello de calidad y autenticidad. No solo certifica su lugar de origen, sino que también asegura que posee cualidades particulares de la región donde fue fabricado. Tomemos el ejemplo del Pisco, que, al llevar la denominación de origen, está asegurado que cumple con estándares de calidad específicos.
La relevancia de este concepto radica en su capacidad para destacar un producto un en el mercado al proporcionar una indicación clara de su origen y calidad. Además, desempeña un papel crucial en la protección del producto frente a la falsificación y el aprovechamiento indebido de su reconocida reputación. En resumen, la obtención de una Denominación de Origen no solo otorga distinción a un producto, sino que también incrementa su valor y le proporciona una sólida defensa en el competitivo mundo empresarial.
La bebida bandera del Perú
Un buen ejemplo de esto se puede ver en la exportación del Pisco, bebida que llena de orgullo a todos los peruanos y la cual, en los últimos años, ha trascendido fronteras llegando a muchos países como Estados Unidos, España, Países Bajos, Japón, Bélgica, Francia y Reino Unido, ganando un lugar en la escena internacional de la coctelería.
Durante la charla “Pisco: Conociendo más de nuestra ‘Bebida Bandera’. Retos y proyecciones”, organizada por el Comité de Pisco del gremio, Julio Pérez Alván, presidente de la Asociación de Exportadores (Adex), afirmó que entre enero y octubre de este año los envíos ascendieron a 7 millones 892 mil dólares y proyectó que los despachos de Pisco este 2023 cerrarían en 10 millones 500 mil dólares, lo que equivaldría a un incremento de 0.2% en relación con el 2022.
“Este logro es el resultado de un trabajo conjunto de las familias productoras, exportadores y las OCEX (Oficinas Comerciales en el Exterior), que dan a conocer al Pisco en cada rincón del mundo, destacando su calidad y versatilidad”, indicó. Asimismo, agregó que los reconocimientos, medallas y altas puntuaciones ganadas en concursos internacionales son una muestra de su alta calidad.
Desafíos y oportunidades en el mercado internacional
Pérez Alván destacó el éxito del pisco en mercados como Estados Unidos y Europa, resaltando la necesidad de conquistar nuevos territorios en Asia y Oceanía, con el respaldo crucial de las Oficinas Comerciales del Exterior (OCEX) para identificar compradores potenciales.
“Aunque es una bebida con un gran potencial, queda mucho por hacer. Desde ADEX se solicitó al Ministerio de Desarrollo Agrario (Midagri) la ejecución de un censo para conocer cuántas áreas de cultivo de uvas pisqueras existe y así proyectar un mejor futuro, el cual ofrece amplias posibilidades para la bebida nacional”, mencionó.
Como un llamado a la acción, el presidente de Adex abogó por incrementar la producción de uvas pisqueras, el volumen de pisco y la protección de la Denominación de Origen. Afirmó que la lucha contra la falsificación del Pisco es un punto clave y, con un tono optimista, recordó el firme compromiso del gremio en coordinar con diversas entidades para garantizar la calidad y la competitividad internacional para contribuir al desarrollo y la expansión global de las empresas del sector.
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