Así como el primer grito de la independencia de México lo dio el sacerdote Miguel Hidalgo y Costilla, el primer presidente del Congreso del Perú fue el sacerdote Francisco Xavier de Luna Pizarro, quien años más tarde sería el XX arzobispo de Lima. Esto demuestra el importante papel de la Iglesia católica en la formación del Perú.
A diferencia de la Constitución de Francia que nace de la revolución francesa, la Constitución del Perú que también nace con la independencia, no tuvo que romper con la Iglesia, sino con España. Hoy existe un concordato entre la Iglesia y Estado, que reconoce su aporte y colaboración, así como el de otras confesiones religiosas.
Para el historiador peruano Ricardo Cubas, “la religión es el elemento clave en la articulación de la cultura y sociedad”, y menciona a pensadores no creyentes como el filósofo y sociólogo alemán Jürgen Habermas y el abogado y catedrático chileno Carlos Peña, quienes consideran que partir de la religión puedes encontrar una serie de elementos cósmicos que guían tu vida.
“La religión es una opción articuladora de tu vida, de tu forma de ver el mundo y de la existencia. En el caso peruano y latinoamericano, la Iglesia católica tiene un papel articulador con sus luces y sus sombras y ha sido fundamental para lograr esa síntesis viviente que llamó el pensador peruano Víctor Andrés Belaúnde de comprensión de la realidad indígena”, acota.
A diferencia de otros pensadores seculares, para Ricardo Cubas Ramacciotti, quien es doctor de la Universidad de Cambridge y profesor de la Universidad de los Andes, Chile, la Iglesia católica no es una institución más de la sociedad civil, sino un punto clave en la articulación de la cultura y sociedad.
“La religión cumple un papel esencial que no lo entiendan algunas corrientes seculares, pero otras la entienden muy bien y son contrarias a esa posición como Vladimir Cerrón, quien sabe muy bien la influencia de la Iglesia y cómo atacarla, así como hay otros que no la entienden”, acota Cubas.
Pero, ¿cómo llega la Iglesia al bicentenario? La Iglesia católica en el Perú y en el mundo llega en crisis, explica Cubas. “Ha habido escándalos a nivel universal de la Iglesia y en el Perú (el caso más mediático el del Sodalicio), pero también han habido divisiones muy fuertes entre liberacionistas y la ortodoxia católica”, señala.
Pese a sus divisiones, “es una iglesia que sigue calando en la gente, pero que tiene cada vez menos vocaciones. Una iglesia dividida y teñida de algunos escándalos que ha mellado mucha de su influencia. Sin embargo, sigue siendo un referente importante para el país”, acota Cubas Ramacciotti.
“El arzobispo de Lima, ya sea conservador como Mons. Cipriani o uno más progresista como Mons. Castillo, es escuchado, es tomado como un referente importante para el país. Más allá de las posiciones políticas son agentes de diálogo, de conciliación, de esperanza para mucha gente”, indica.
Este importante papel articulador de la Iglesia católica en nuestro país, que puede palparse en las muchas obras pastorales, sociales y educativas, son prueba del papel que tiene en nuestra sociedad peruana. Un papel que sin duda puede ayudar a cohesionar a nuestra golpeada y polarizada ciudadanía.
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