El actor venezolano está vivo de milagro.
Con varias películas y una serie a punto de estrenarse, está claro que la carrera interpretativa del actor Édgar Ramírez pasa por uno de sus mejores momentos. Sin embargo, ni la fama ni el reconocimiento internacional de los que disfruta el venezolano evitaron que sufriese un aparatoso accidente de tráfico cuando iba de camino a los estudios Paramount de la ciudad de Los Ángeles, del que sorprendentemente consiguió salir sin un solo rasguño.
Así lo anunció el propio intérprete a través de su cuenta de Instagram a la vez que desvelaba orgulloso la foto que ocupará la portada del nuevo número de la revista Flaunt, de la que es protagonista.
"Aquí mi portada para Flaunt, una de las más especiales que he hecho, ya que por poco no la hago: tuve un accidente de carro muy feo el día anterior a la sesión fotográfica, el mismo día de la entrevista. Milagrosamente no me pasó nada, ni un rasguño", anunció el artista en la citada plataforma.
Aunque no quiso dar más detalles de lo sucedido en su perfil de la red social, Édgar explicó posteriormente los pormenores del incidente ante el periodista con el que tuvo que reprogramar la cita a causa del inesperado episodio vivido, que tuvo lugar solo unas horas antes de la hora fijada para la entrevista.
"Iba de camino a los estudios Paramount por la avenida Melrose cuando una señora se pasó la señal de Stop cruzándose en nuestro camino. Chocamos y nuestro auto quedó destrozado. Mi conductor se rompió una mano y una pierna y ella también sufrió daños muy graves. Estas cosas hacen que veas la vida con otra perspectiva. Te recuerda lo frágil que es todo...", reflexiona el intérprete en el artículo de la revista Flaunt.
El actor supo mantener en todo momento la calma y acabó convirtiéndose involuntariamente en el héroe del día gracias a su capacidad para controlar sus emociones, que le lleva a centrarse exclusivamente en solucionar los problemas más inmediatos.
"En los momentos de urgencia siempre tengo la mente despejada. Normalmente soy bastante despistado respecto a las cosas del día a día, suelo olvidarme las llaves, pero es muy interesante cómo en momentos de gran estrés siempre reacciono con tranquilidad y claridad. Después me derrumbé, pero en el momento llamé a los servicios de emergencia, comprobé cómo estaba mi chofer, cómo estaba la mujer y seguí todas las instrucciones que me dictaba por teléfono la chica del servicio de emergencias...", recuerda el artista en la misma conversación.
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